jueves, 28 de noviembre de 2024

BREVE EXPLICACIÓN SOBRE LA GUERRA SUCIA





GUERRA DE MIEDO CONTRA MIEDO

Los años de plomo fueron una completa tragedia. Y justamente por eso debemos preocuparnos por mantener una memoria cierta, de las que apoyan los documentos y testimonios reales de la época que dan cuenta de una guerra revolucionaria, guerra contrasubversiva, guerra sucia (tal cual yo prefiero calificarla) o como quieran llamarla pero siempre guerra. Negar la existencia de la guerra es tanto desconocer los "partes de guerra" publicados por el ERP y Montoneros como mantener abierta la posibilidad de repetirla.

La guerra revolucionaria declarada por las organizaciones terroristas dirigidas desde Cuba no fue una guerra convencional, de cara a cara, con ejércitos a bandera desplegada como se combatió en Malvinas. 

Fue lo que son las guerras revolucionarias: mugre y clandestinidad.

El terrorismo castrista desplegó su ofensiva con ataques solapados tras infiltrar distintos ámbitos de la sociedad, hasta en hogares familiares poniendo bombas debajo de las camas. Y su violencia traía un mensaje: "Somos  más malos que ustedes. Ríndanse a nuestra voluntad".

Pues bien, los argentinos no nos rendimos ante la agresión comunista, y nuestros soldados se adaptaron al escenario de guerra sucia que instaló el enemigo; para dejar bien en claro que podíamos ser más malos que ellos y sostener nuestro estilo de vida. Así se hizo lo necesario.

¿Errores, excesos y horrores? Por supuesto. No tiene propósito negarlos. Las guerras de Inteligencia, las que se libran desde la clandestinidad para definir la supremacía entre estilos de vida de convivencia imposible, se combaten sin piedad y sin reglas. Porque la única regla es no perder.

¿Cometimos crímenes? Sí. Para no cometer el mayor de los crímenes: que terroristas como Firmenich o Santucho se salieran con la suya y a precio de matar un millón de argentinos nos impusieran otra dictadura con pretensión de eternidad a imagen y semejanza de la de Cuba (que sigue siendo hoy día la misma dictadura que lanzó contra nosotros sus organizaciones terroristas).

Se pueden cuestionar los métodos, obviamente que sí, pero no al extremo de ser funcional al enemigo. En tal sentido, incluso disertando en ámbitos como el Círculo Militar he formulado severas críticas a determinadas conductas implementadas durante la guerra, pero nunca olvido el contexto criminal propio de la época, presente en los míos y en los otros, tal como lo manifesté hace largos años en la entrevista que recuerda este fragmento de video: 


Entonces, ¿somos criminales los argentinos por haber eliminado terroristas? No. ¿Debemos sentir alguna culpa por los terroristas neutralizados? Ninguna. Que los lloren en Cuba. 

LOS DESAPARECIDOS COMO TÁCTICA DE GUERRA

Veamos ahora la cuestión de los desaparecidos como táctica de guerra.

Téngase presente que antes del golpe de Estado de 1976, en el interregno "democrático" del peronismo, los terroristas que estaban presos conforme a Derecho fueron amnistiados y que esa amnistía sólo sirvió para que sintiéndose con mayor impunidad retomaran la lucha armada.

Las organizaciones terroristas que operaban en Argentina eran de una dimensión mucho mayor que las Brigadas Rojas, y si Italia las pudo combatir con la ley en la mano fue porque no tenían ni el despliegue ni el grado de infiltración de Montoneros y ERP. Aquí además del terrorismo urbano, las organizaciones castristas atacaron cuarteles y coparon ciudades, por sólo señalar dos tipos de acciones que definen un estado de guerra.

Muchas veces se pretende poner el caso italiano como ejemplo de lo que debió hacerse, pero es una comparación que carece de todo realismo.

En los setenta, la información circulaba a mucho menos velocidad que hoy, eso era determinante para que capturado un enemigo se tuviera tiempo de sacarle información y golpear por sorpresa a su organización. Lo cual no hubiera ocurrido de iniciarse un proceso penal. Cosa que sólo hubiera traído aparejada mayores vulnerabilidades para las fuerzas del Estado argentino, pues cabe recordar que al Juez Quiroga lo mataron los terroristas por haber dictado sentencia contra ellos en procesos legales. 

Y subrayo este punto, porque a pesar del evidente prevaricato con que los militares han sido condenados por combatir y vencer al terrorismo castrista nunca mataron a ningún juez. Entre otras razones porque esos jueces, pueden serlo gracias a que los militares ganaron la guerra y con socrático patriotismo soportan las injusticias judiciales del revanchismo. El obsceno prevaricato de los jueces que condenan militares es también un acto de alevosa hipocresía, porque si pueden jugar a ser jueces sólo es gracias a que los militares ganaron la guerra. De ganar Firmenich o Santucho no se hubieran atrevido a juzgar a los vencedores, ni se los hubieran permitido.

Luego, en el fragor de la guerra, a más de capturar, interrogar (bajo tortura, sí) e ir desmantelando células enemigas en sucesivos operativos, había que devolver la gentileza del miedo: que sintieran los terroristas la incertidumbre de no conocer la suerte de sus combatientes.

Y es que la guerra revolucionaria, en su total falta de convención, tiene un rasgo psicológico más fuerte que en otros conflictos; es una guerra de crueldad y miedo contra miedo. Por lo que la derrota de cualquier bando queda sellada cuando en lugar de causar miedo, tiembla de miedo. Y los terroristas temblaron.

Cuando una organización de tipo militar no tiene certeza sobre la disposición de sus tropas, ni puede determinar si sus faltantes han sido capturados, están muertos o desertaron, se produce el desbande. Ante ese desbande, Montoneros intentó la locura de una contraofensiva idiota en la que, como si la consigna hubiera sido "animémonos y vayan", no se arriesgó ningún jefe.

EL QUE A HIERRO MATA A HIERRO MUERE

¿Qué esperaban los terroristas que mataron a militares y sus hijos en sus casas o en las puertas de sus casas? ¿Qué una vez capturados se les iba a ofrecer un café con medialunas y otra amnistía?

No iba a pasar. Por lo que cayó encima de los subversivos castristas todo el odio que generaron con su proceder artero. 

Es un estribillo común de la prédica izquierdista de posguerra decir que aquí no hubo guerra sino genocidio y que la apropiación de hijos de terroristas fue una práctica aberrante. Pues bien, al respecto es preciso contestar con toda claridad: cada uno de los llamados "nietos recuperados" demuestra dos cosas.

Primero demuestra el sentido humanitario de quienes adoptaron como propios a los hijos de terroristas (terroristas que, dicho sea de paso, eran horribles padres y solían usar a su prole como escudo humano). Supusieron los militares que de esa forma se evitaría que crecieran odiando como odiaban sus padres.

Segundo demuestra la inexistencia del tal mentado genocidio: los nazis no preservaban vidas de bebés judíos, ni los turcos a los armenios, ni los hutus a los tutsi. 

Ese rasgo humanitario de los militares argentinos, en el marco de una guerra sin ningún tipo de convenciones, confirma que su objetivo no era exterminar personas sino aniquilar el accionar terrorista. Es el mismo motivo por el que pulula tanto "sobreviviente". 

EL GENOCIDIO QUE NO FUE

Más aún, los militares argentinos impidieron el genocidio que sí planificaba el terrorista castrista Roberto Santucho, jefe del ERP, quien calculaba tener que matar a un millón de argentinos para imponer el "socialismo". 

Por esa misma razón es una completa aberración la recurrente e interesada búsqueda de equiparar los desaparecidos con los muertos del nazismo. Es ofensivo igualar víctimas exterminadas en razón de lo que eran y con total prescindencia de cual fuera su conducta, con aquellos que en el marco de una guerra revolucionaria que ellos mismos declararon fueron muertos por ser integrantes de organizaciones terroristas que no tenían ningún prurito en matar inocentes. 

Nada de esto se dice en el relato oficial impuesto sobre los años de plomo, es algo que la imposición cultural de la "corrección política" impide manifestar, porque con "el diario del lunes" se ha olvidado la realidad del domingo. Las teorías sobre la posibilidad de haber lidiado con los terroristas aplicando algún otro criterio, meramente policial y por ende ajustado estrictamente a la ley penal, olvidan que Argentina no era Suiza. Ese pequeñito detalle no puede pasarse por alto sin una hipocresía descomunal, como la que campea desde hace décadas en Argentina.

Una vez más expreso mi agradecimiento a quienes combatieron y vencieron al terrorismo castrista impidiendo que nos arrebataran Patria y Libertad. 

LA GUERRA SUCIA COMO PROBLEMA ACTUAL

Un país que condena implacable e impiadosamente a sus defensores entrega su futuro al enemigo. Es lo que hizo Argentina para hundirse en la decadencia a la vista de todos.

Por ello los jóvenes, que enfrentan las adversidades del presente, deben comprender que mientras el pasado se siga mintiendo y llos militares encarcelados, la política toda seguirá envilecida por la subversión cultural del kirchnerismo y el Poder Judicial seguirá siendo, prevaricato sistematizado mediante, una burla al sistema republicano.

La batalla cultural consiste principalmente en desmantelar el relato y corrupción kirchnerista sobre los años de plomo, porque si se le impone a cualquier sociedad la culpa por haberse defendido del terrorismo esa sociedad debilita su identidad y con ello su voluntad de ser y prevalecer. 

Argentina es el mejor ejemplo de esa debilidad: se dejó embaucar durante 20 años tolerando que las mentiras crecieran y se impusieran como verdades dogmáticas. 

Si los jóvenes argentinos quieren ser dueños de su futuro y no muñecos de ajenas maquinaciones, deberán rescatar la verdad histórica que les han negado conocer.

Brego entonces por la libertad de Alfredo Astiz y todos los vencedores de la guerra contra el terrorismo castrista que, prevaricato mediante, se encuentran prisioneros.

Y afirmo: No fueron 30.000, no fue genocidio, fue guerra. Puedo cuestionar los métodos, pero no voy a renegar de la victoria.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

miércoles, 27 de noviembre de 2024

LOS QUE MUEREN DE DESIGUALDAD ANTE LA LEY, por Ariel Corbat.




Hay posteos que no querría hacer, porque son dolorosos y hablan de cuestiones que no pueden más que lamentarse, pero que son necesarios para entender la realidad.

Leer esta lista les dará idea de la edad y afecciones físicas de los vencedores del terrorismo castrista presos por causa del prevaricato sistematizado desde 2003.

Ninguno de ellos debió ser juzgado, porque para juzgarlos se violenta toda la lógica jurídica que se desprende de la Constitución Nacional, pero peor aún, incluso con las normas que supuestamente rigen para los "jueces" (prevaricadores del primero al último) que deciden sobre la libertad de estos hombres, tampoco les aplican la igualdad ante la ley para concederle beneficios que en determinadas condiciones se reconocen a cualquier preso; como la prisión domiciliaria. 

Mientras tanto, para que la injusticia sea totalmente manifiesta, la ex presidente Cristina Fernández de Kirchner, condenada con sentencia firme por actos de corrupción perpetrados desde el más alto cargo de la administración pública sigue gozando de su libertad ambulatoria.

Y repito entonces una vez más: faltan en la República Argentina jueces honorables, el Poder Judicial se ha convertido a lo largo de los años en un Poder Prevaricador que despreciando la Constitución Nacional ha convalidado en su propio beneficio corporativo el daño institucional, la degradación cultural, la miseria material y hasta la miseria intelectual que exhibe nuestro país.
                                                                                              
-LISTADO DETENIDOS U34-

 PABELLÓN A:

1.Julio Héctor Fermoselle 84 años TOF 2 Rosario (Hipertenso, diabetes, etc)
2.Walter Salvador Dionisio Pagano  78 años TOF 1 Rosario (un solo ojo, baja visión ojo derecho, infarto miocardio con by pass)
3.Ricardo Juan García 69 años TOF 1 La Plata (Hipertenso, bloqueo arterial, prostatitis)
4.Augusto Edmundo Caselli Garcés 78 años Juzg. Crim y Correc. Federal La Plata (artritis, trastorno psiquiátrico)
5.Roberto Guillermo Catinari   69 años TOF 1 La Plata (extrasistoles ventricular con cormovilidades coronarias, gastritis aguda y divertículos)
6.Hugo Miguel Castagno Monje  79 años    TOF 1 San Martín (riesgo cardiáco por infarto miocardio, diabetes tipo 2, hipertensión, cataratas, cáncer de esófago. hipoacusia)
7.Bernardo Caballero   69 años TOF 1 San Martín (sin datos)
8.Héctor Oscar Seisdedos  74 años TOF 5 San Martín (infarto miocardio, cálculos renales, manchas en hígado, hipertenso, prostatitis)
9.Eduardo Daniel Cardozo  72 años TOF San Juan (hipertenso)
10.Jorge Alberto Blanco 77 años TOF 2 La Plata (hipertenso, artrosis, artritis, perdida auditiva)
11.Ricardo Taddei   82 años TOF 2 Capital Federal (hipertenso, gastritis crónica, cataratas)
12.Gabriel Benjamín Kesler 69 años Juzgado Fed, 1 Santa Fe (sin datos, recién ingresado)
13.Rubén Héctor Escobar 75 años TOF 1 Cap. Federal (sin datos recién ingresado)
14.Norberto Eduardo Condal 81 años  TOF Bahía Blanca y TOF Neuquén (hipoacusia, hipertenso)
15.Esteban Adolfo Sanguinetti 71 años TOF 6 Cap. Federal (epoc, quistes renales, manchas pretumorales pancreas)
16.Hugo Alberto Guallama 77 años TOF 1 La Plata (cáncer de prostata operado, epoc, fractura de tibia y perone)
17.Luis Milcíades Loza 77 años TOF 4 Capital Federal (prostatitis, vasculitis, fibro mialgia)

 PABELLON B:

18.Acosta Jorge Eduardo 83 años Causa ESMA TOF 5 CABA (hipertension, dislipemia, duodenitios, compromiso cardíaco, cáncer vaso celular)
19.Castillo Carlos Eduardo 71 años TOF 1 La Plata (artritis, artrosis, vesículitis aguda, problemas digestivos severos)
20.Duret Alejandro 72 años TOF 1 Mar del Plata (stress postraumático de guerra)
21.Etchart Ernesto 69 años   TOF 1 Bahía Blanca  (hipertenso)
22.Maisonave Carlos 73 años  TOF 1 La Plata (hipotiroidismo, hiperplasia de próstata, hipertenso, diverticulosis severa, hipoacusia)
23.Ramos Eduardo 69 años TOF 1 Santa Fe (epoc, tumor pulmón derecho, obstrucción coronaria)
24.Sandoval Mario 71 años TOF 5 CABA (mialgia, insonmio, dolores musculares severos)
25.Di Pascuale Jorge 77 años TOF 1 Y 2 La Plata y TOF 1 Neuquén (cáncer colon, flebitis)
26.Maidana José 74 años TOF 4 CABA (sin datos)
27.Chaz Alfredo  67 años TOCF 1 Rosario (sin datos)
28.Guarroccena Jorge  74 años TOF 5 CABA (sin datos)


 PABELLON C:

29.Pezzeta Angel Ricardo 72 años TOF 1 La Rioja (resección transuretral de vejiga,hernioplatia unbilical, artrosplastia cadera derecha)
30.Domato Horacio Rafael 82 años TOF Formosa (insonmio, lumbalgia, stress postraumático, ACV)
31.Von Wernich Christian  86 años TOF 1 La Plata (carcinomas varios, discapacidad motora certificada, operación extracción tumor 3kgs pierna derecha)
32.Carballo Raúl 70 años TOF 1 La Plata (hemorroides, vesiculitis, cataratas)
33.Lopez Arnoldo José  71 años TOF 1 Córdoba (oclusión coronaria varias, syntax core 56.5, obstrucción femorales, hipoacusia)
34.Sanchez Rubén Vicente 72 años TOF 1 La Plata (sin datos)
35.Cendón Néstor  76 años TOF 4 Cdro Py (astigmatismo izquierdo, quenatitis derecho, glaucoma)
36.Fleba Angel 76 años TOF 1 Y 2 La Plata (hipertenso, hiperpalsia prostática, dislipemia, gastritis, colon irritable, deterioro cognitivo)
37.Ferreyra Carlos 71 años TOF 1 Bahía Blanca (epoc, cáncer oftalmico, trioditis de hashimoto, insuficiencia tricuspide, quistes renales, esteatosis de hígado, discopatía lumbosacra, hiperplasia prostática, esofaguitis, hiperplasia arterias cerebrales)
38.Ojeda José Luis 72 años TOF 1 Mar del Plata (deficiencia cardíaca y pulmonar, soriasis, hernia hiatal)
39.Perez Carlos  73 años TOF 1 Córdoba (gastritis crónica)
40.Otero Fernando  73 años TOF 1 Mar del Plata (artrosis reumatoidea general, trauma acústico)
41.Lucero Daniel 76 años TOF 2 La Plata (hipertenso, hipertiroidismo, hipoacusia bilateral, parkinson fenotipo akineto rígido, apnea respiratoria)
42.Mendez Juan Miguel 82 años TOF 2 Cdro Py (3 stens deficiencia coronaria, cánce de colon, diabetes)
43.Brunello Roberto Carlos 75 años TOF 1 Bahía Blanca (hemorroides, pérdida de memoria, cancer de piel)
44.Monteverde Jorge  68 años TOF 2 Cap Fed (diabetes, hipertenso, artritis)

 PABELLON D:

45.Enrique Andrés López 75 años TOF 2 Rosario y TOF 1 Rosario (artritis, artrosis, deficiencia válvula mitral y tricúspide, hernia iatal, dislipemia, depresión, osteporosis de cadera)
46.Juan Daniel Amelong 72 años TOF 1 Rosario y TOF 2 Rosario (infarto ventrículo izquierdo, dos stens y un by pass, trombosis general, hipercolestorolemia, hipertenso, artrosis, epoc)
47.Gonzalo Sanchez 73 años TOF 5 CABA (dos infartos miocardio en la U34, 4 stens, deficiencia v´´alvula mitral y tricúspide, hernia iatal, prostatitis, insuficiencia renal, epoc, litiasis bilial, polipos en colon)
48.Antonio Jesús  73 años TOF 1 La Plata (trobosis, aneurisma pierna derecha, tumor uretral, prostatitis, polipos vejiga, hematurias reiteradas, hipertenso, depresión, ansiedad, epoc)
49.Juan Carlos Pomares 70 años TOF 1 La Plata ( 2 stens, hipertenso, hernia inguinal, polipos colon, hipertiroidismo)
50.Emilio Pedro Morello 72 años TOF 2 CABA (sin datos)
51.Schumacher Luis Alberto 70 años La Plata Juzgado Crim y Correcional (internado desde hace 3 meses en Hospital Héroes de Malvinas- Merlo, estado grave, cáncer terminal)

 PABELLON E:

52.Simón Julio 84 años TOF (demencia senil, hipertenso, operado del corazón, enfermo cardíaco, a perdido completamente sus facultades mentales)
53.Verges Héctor 81 años TOF  (demencia senil, incontinencia urinaria, sin piezas dentarias, hipertenso, diabético).

martes, 19 de noviembre de 2024

GORDODAN Y UN ACTO BIZARRO: MEAR FUERA DEL TARRO




Allá por 2019, y supongo que antes, un tal Javier Milei, disruptivo vocero histriónico y apasionado de las ideas de la Libertad, resaltaba en sus conferencias la estruendosa superioridad estética y moral del capitalismo sobre el socialismo.

Y desde mucho tiempo antes un tal Ariel Corbat, apenas uno que escribe un blog, pregonaba que la obsecuencia es la peor de las traiciones porque se disfraza de lealtad. 

Así los dos dijimos dos verdades irrefutables, que vale repetir:

1) El capitalismo es estética y moralmente superior al socialismo. 

2) La obsecuencia es la peor de las traiciones porque se disfraza de lealtad.

Con estas dos verdades claras, cabe analizar lo sucedido el sábado 16 de Noviembre cuando Daniel Parisini, más conocido por su rol en X como GordoDan, presentó la agrupación "Fuerzas del Cielo" con una estética horrible de oscuridad totalitaria y un discurso que acaso, hermosa palabra la palabra "acaso", haya pretendido ser irónico. 

Dijo GordoDan, aclarando en algún momento que por arma se refería a los celulares, que Las Fuerzas del Cielo eran "el brazo armado de La Libertad Avanza" y la "guardia pretoriana del Presidente Javier Milei". 

Como gritar "Ein Volk, ein Reich, ein Führer" y explicar que sólo era para llamar la atención.

Ahora bien, quien se desenvuelve habitualmente en redes sociales no ignora cómo funcionan, por lo que si  se va a difundir en ellas un acto político realizado con escenografía de mal gusto y una arenga propia de grupo de choque, no hay salvaguarda de metáfora que valga. En ese contexto, se sabe perfectamente lo que se va a viralizar y ese es el mensaje.

A simple vista el acto no responde a la pregonada superioridad estética del capitalismo, las pancartas rojas colgando verticales dan mitin fascista, nazi, comunista o, en el mejor de los casos, de la medieval TFP (Tradición Familia y Propiedad) del Dr. Cosme Beccar Varela (con la que tuve algún que otro encontronazo juvenil cuando se discutía el divorcio).

Luego, más allá de cualquier aclaración, el mal gusto de hablar de "brazo armado" remite a un pasado no muy lejano cuyas consecuencias todavía hoy se padecen. 

Brazo armado de facciones políticas pretendieron ser el ERP-PRT Y Montoneros, integradas por terroristas que creyéndose iluminados mataban gente por pensar distinto. Sobre ese delicado momento de nuestra historia, sabiendo que no soy ni quiero ser neutral lo digo claramente: El baúl del Falcon Verde fue un merecido viaje para los que pretendieron hacer política por la fuerza de las armas. 

El monopolio de la violencia, y cualquier liberal lo sabe, corresponde al Estado. Y si no lo saben, lean la "Teoría Pura del Derecho" de Hans Kelsen. 

En la Nación Argentina no hay ni habrá otro brazo armado que el institucionalizado por la Constitución Nacional, cuyo comandante es hoy Javier Milei.

No hay lugar acá para coqueteos de picardía semántica: los nuestros, los que evitaron que esos "brazos armados" de facciones castristas nos convirtieran en otra dictadura comunista con pretensiones de eternidad, están presos. Injustamente presos.

Y desgraciadamente es un dolor vivo porque durante los 20 años del Régimen K se falseó la historia haciendo pasar a terroristas por víctimas, todo ello acompañado de una corrupción de dinero descomunal a la que sirvió y sirve de cortina el prevaricato sistematizado por el cual muchísimos militares están presos.

No es un tema para tomárselo en broma, porque además la libertad de nuestros presos políticos es un reclamo de muchos que votamos a La Libertad Avanza. Asunto que el Presidente Milei debería poner en su agenda si es que aspira a que el país tenga un Poder Judicial honorable en lugar del inmundo "Poder Prevaricador".

De hecho, el kirchnerismo va a tener esperanzas de recuperar poder en tanto su relato impuesto a partir de la mentira de los 30.000 desaparecidos no sea confrontado abiertamente yendo por la liberación de los presos políticos. Y si alguien tiene dudas de esto, ahí está en la Provincia de Buenos Aires el diputado Guillermo Castello, a quien el kirchnerismo y sus satélites quieren expulsar de la Legislatura por decir una verdad sarmientina: Rodolfo Walsh fue un asesino terrorista.

La estupidez dicha por GordoDan, entre otras desgraciadas consecuencias, le permitió a Eduardo Feinmann repetir esa boludez del "genocidio" de la dictadura. A unos boludos les sale el fascista/comunista y a Feinmann el progre repetidor de versos zurdos que es.

Pero si la estética del acto fue tan repudiable como el discurso metafórico de GordoDan, el mensaje es todavía peor porque demuestra que la obsecuencia como deformación de la lealtad es la peor de las traiciones. El objetivo de estas "Fuerzas del Cielo", con la insistencia en seguir al líder, es ser a Milei lo que La Mazorca fue a Rosas. Y ahí está la traición, porque Javier Milei decía venir a despertar leones no a guiar corderos. 

Por supuesto que el Presidente Milei tiene que ser vigorosamente sostenido por quienes lo votamos, desde luego hay que confrontar con el kirchnerismo, entendiendo que la Libertad es frágil y se pierde tan pronto como se deja de pelear por ella, pero no sirve cambiar un fanatismo por otro adoptando los modos patéticos de la devoción a Santa Cristina.

El liberalismo, que es tolerancia antes que respeto (discusión para otro momento), es esencialmente racional. Las pasiones son buenas siempre que tengan la contención del raciocinio. Yo lamento expresiones de buenos amigos llamando a ofrecer al líder una fe ciega, a apoyar sin cuestionar absolutamente nada. Los veo con pena olvidar por momentos dónde está el enemigo a vencer y fogonear conflictos internos que no tienen verdadera razón de ser. 

Y me desagrada que Agustín Laje y Nahuel Sotelo, dos jóvenes por cuyo futuro político apuesto a pleno, hayan sido parte de ese acto bizarro que no debe repetirse. 

Todo esto lo escribo sin que me importe lo que por su parte critique la izquierda, porque mis críticas tienen otras razones y lo que digan los zurdos con su hipocresía de siempre me trae sin cuidado.

Una estética mejor, una moral mejor, un mensaje mejor, no es mucho pedir.

Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.












domingo, 10 de noviembre de 2024

SEINELDÍN Y KASANZEW





Allá por 1982 cuando yo estaba en cuarto año del colegio secundario, ya finalizada la Guerra de Malvinas, descubrí a Mohamed Alí Seineldín por una revista en la que se registraba una frase suya que me conmovió:

 "Todos quieren ser los padres de la victoria, yo quiero ser el padre de esta derrota".

Así por primera vez tomé conocimiento de la existencia de tan particular oficial del Ejército Argentino y mi admiración fue inmediata. Seguramente decía lo que yo esperaba que se diga, porque nunca entendí la vergüenza por Malvinas.

Desde entonces a hoy, con mucho libro leído, con mucho veterano escuchado, con algunas investigaciones históricas de las que fui parte, en fin, con todo lo que se puede poner arriba de la mesa para juzgar la conducta de alguien en determinada situación, no encuentro absolutamente nada que pueda reprocharse a Mohamed Alí Seineldín en el transcurso de la Guerra de Malvinas. 

A él le asignaron proteger el aeropuerto y el aeropuerto se mantuvo operable durante toda la guerra, los hombres que fueron entrenados por él o revistaron bajo su mando, ya sean comandos o tropa regular, mostraron una alta moral y capacidad de combate. Y no fue casualidad el buen desempeño de la Compañía C del Regimiento 25 que a órdenes de  Carlos Daniel Esteban, con secciones dirigidas por Roberto Estévez, Juan José Gómez Centurión y Roberto Reyes, ganó el apelativo de "Los Bravos del 25". 

La posguerra de Malvinas fue una doble posguerra porque se convirtió también en la posguerra de la lucha antisubversiva (Guerra Sucia, como yo prefiero llamarla), y ambas fueron signadas por la incomprensión, el olvido y la manipulación de la mentira. En tal sentido la posguerra de Malvinas tal vez pueda darse por terminada, pero la posguerra de la Guerra Sucia todavía está en carne viva a través del prevaricato sistematizado que desde 2003 a hoy encarcela hombres que no hicieron otra cosa más que cumplir con su deber en farsas de juicios inconstitucionales donde no se respetan ninguna de las garantías del debido proceso y el derecho a la defensa.

Ambas posguerras se cruzaron en el alzamiento "carapintada" de Semana Santa de 1987, los dos de 1988 y en el ataque terrorista del MTP contra el Regimiento de La Tablada del 23 de Enero de 1989.

Los tres alzamientos carapintadas reclamaban principalmente poner un límite razonable a la pretensión de juzgar los hechos de la Guerra Sucia, y como corolario perfecto de aquel reclamo apareció el ataque subversivo dirigido por Gorriarán Merlo para recordarle a la olvidadiza sociedad y al propio Presidente Raúl Alfonsín contra qué clase de hijos de puta los militares habían librado la Guerra Sucia. 

En esos años estudiaba Derecho en la UBA y en cada discusión posible (en esos años se podía hablar y discutir civilizadamente) defendí el reclamo carapintada. 

No así el despropósito del 3 de Diciembre de 1990 que políticamente fue una estupidez contraproducente, tan de microclima fanatizado como lo había sido el ataque del MTP. En esa jornada tanto por razones de convicción personal como de pertenencia institucional (SIDE) revisté entre los leales. Escribo y recuerdo las caras de los conscriptos parapetados en las columnas de las veredas a lo largo de la Avenida Leandro N. Alem. La expresión en sus rostros daba cuenta de lo racionalmente inentendible de la situación generada por los acólitos de Seineldín. Una jornada absurdamente sangrienta, con consecuencias nefastas para el Ejército Argentino y la Nación toda. 

La responsabilidad de Seineldín en ese hecho demuestra que su comprensión de la política era nula. Si algo debe criticarse de su vida pública es haber dejado que esa acción se llevara a cabo por los que decían obrar en su nombre. Pero ese error grosero y luctuoso, no resta mérito alguno de lo obrado por Seineldín en Malvinas. 

Considero a Seineldín un patriota equivocado. Y en términos de sentimientos personales lo de 1990 lo viví sintiendo que ese chico de 16 años ilusionándose con el perfil del Seineldín que le presentaba una revista en la espera del dentista (así de claro y preciso recuerdo ese momento), había sido traicionado.  

Escribo esto, que es como pensar en voz alta, porque circula un video de la hija de Seineldín en respuesta a cosas que sobre su padre habría dicho Nicolás Kasanzew. 

Como supongo le pasa a todos los malvineros, me apena mucho que ocurran este tipo de polémicas desagradables. No sé que dijo Kasanzew, un tipo al que valoro porque durante un largo y ominoso tiempo todo el peso de la desmalvinización cayó impiadosamente sobre él. Y se la bancó. 

Dicho esto, como con todo el mundo también tengo algunas diferencias con Nicolás, no siempre comparto sus apreciaciones y a veces su estilo no es de mi agrado. Pero al igual que Seineldín creo que tiene un lugar reconocido en la causa de Malvinas.

El punto que me llamó la atención sobre esta situación, es que Kasanzew habría dicho (repito que no me consta) que Seineldín apoyaría a Hugo Chávez o a Fidel Castro. Al respecto tengo una consideración para compartir. 

Es cierto que entre los carapintadas seineldinistas, particularmente algunos civiles, que estaban formando en ese entonces algo que si mal no recuerdo era el MINEI (Movimiento de Integración Nacional e Iberoamericana), hubo una corriente de simpatía muy marcada hacia Hugo Chávez. 

Pero no llegó a ser jamás una real compenetración ideológica ni fue en lo operativo más allá de algunos contactos, sino un fenómeno como el que se dio con la Revolución Libertadora respecto de su proclamada alegría por la llegada al poder en Cuba de Fidel Castro. En ese momento quisieron ver desde la Libertadora un cierto paralelismo entre el derrocamiento de Perón y la caída de Batista, ilusorio deseo que duró hasta que Fidel Castro dejó claro que la suya sería una dictadura comunista. 

No fueron nuestros gorilas (palabra que escribo con afecto por si alguien se confunde) los únicos que pensaron que lo que bajaba de la Sierra Maestra era una revolución nacionalista en lugar de una tiranía comunista, de hecho entre los guerrilleros que peleaban contra Batista muchos, incluyendo comandantes, descubrieron tarde (algunos al ser fusilados y otros en prisión) que habían traído el comunismo a la isla. 

Seineldín, más allá de su rechazo a los Estados Unidos (cosa en la que, por ejemplo, el Contralmirante Carlos Robacio intentó explicarle que estaba equivocado), distaba mucho de ser un comunista. 

Por lo demás el propio Chávez se distanciaba de Seineldín allá por 1994, al decir: "Creo que lo de Seineldín tiene mucho que ver con la gente de LaRouche. Una intención de meter en un mismo saco a fundamentalistas, extremistas y militares latinoamericanistas nacionalistas, con un anzuelo que es el de la lucha por la eliminación de los ejércitos latinoamericanos. Son grupos que tienen una revista y un buen manejo, y muchos recursos. Extraño, ¿no? Me horroricé cuando vi la verdad de sus planteos".

Seineldín era políticamente torpe y así lo demuestra su paso por la política. No hay ninguna novedad en ello. Tampoco hay novedad en que su comportamiento en Malvinas fue ejemplar y ese es un asunto cerrado.

Ya tenemos demasiadas divisiones de esas que no sirven para otra cosa que debilitarnos, no sumemos otra  a la causa de Malvinas.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

SHALOM AMIA, POR LA TV PÚBLICA, CUANDO NO TODOS LOS TERRORISTAS SON IGUALES

Hace un rato, hoy domingo 10 de Noviembre de 2024, en un zapping televisivo atiné a pasar por la TV Pública cuando se emitía el programa "Shalom AMIA". 


Con particular desagrado observé el registro de la visita de escuelas primarias de la Red Escolar Judía al mal llamado "Parque de la Memoria", ese lugar en donde la mentira de los 30.000 desaparecidos es un muro al que sobran los ladrillos y le faltan las verdades. 

Ariel Cohen Imach, director de Educación de AMIA, dijo a cámara que con la visita al parque los chicos "aprenden un montón" de lo que tiene que ver con el terrorismo de Estado. En tal sentido hizo mención al testimonio de familiares de judíos desaparecidos en Argentina, pero en ningún momento mencionó a las organizaciones terroristas ni los atentados de esas organizaciones; es decir no indicó que a la visita al parque se le haya dado a los chicos el contexto de la época. Y esa falta de contexto es una de las características que diferencian educación de adoctrinamiento. 

En un speach de extremo y ridículo pacifismo, por no llamarlo de otra manera, afirmó Cohen Imach que "matar a una persona significa terminar con un mundo y salvar a una persona significa salvar al mundo entero"

Añadiendo luego, que se espera que de la visita los chicos se lleven el mensaje de "respetar las ideas de otro, de nunca pensar que los demás no tienen derecho a expresarse, de que no importa a qué pueblo pertenecen o cual es su idea política, o cuales son sus gustos, todos los seres humanos somos igualmente valiosos y tenemos que convivir en paz"

En la señalada falta de contexto, esa frase que podría pasar por bienintencionada se torna digna de ser repetida en alguna película cómica por algún rabino disfrazado de hippie en medio de Gaza. Porque nadie decente quiere andar matando gente, pero en la realidad en la que vivimos, y basta a cualquiera abrir un diario (o un portal de noticias) la realidad es que en el mundo abundan seres despreciables que intentan imponer sus ideas y dominio por la vía del terror y combatirlos es un deber de pura preservación de la humanidad. Los judíos, se supone, lo saben mejor que nadie y no deberían olvidarlo. 

En Argentina, durante los años de plomo, la organización terrorista Montoneros, cuya comandancia militar entre 1978 y 1982 funcionó dentro del servicio de Inteligencia exterior de la dictadura de Fidel Castro (o sea que le cabe a sus acciones la etiqueta de terrorismo de Estado) hacía todo lo contrario de lo que Cohen Imach dice querer trasmitir a los alumnos. Montoneros no respetaba las ideas de otros,  negaba a los demás el derecho a expresarse, consideraban enemigos a personas por su pertenencia a otros pueblos, como por sus ideas políticas y hasta por sus gustos. Montoneros mataba en el convencimiento criminal que no todos los seres humanos somos igualmente valiosos y tenemos que convivir en paz. 

Y me refiero específicamente a Montoneros, como podría decir ERP (Ejército Revolucionario del Pueblo), solamente porque en las imágenes del muro al que le sobran ladrillos se puede leer en primer plano el apellido "Oesterheld". 


Tanto el historietista Héctor Germán Oesterheld como sus cuatro hijas: Diana, Beatriz, Estela y Marina, todos neutralizados durante la, según ellos, Guerra Revolucionaria (a la que yo elijo llamar Guerra Sucia) revistaban en la organización terrorista Montoneros. Al respecto la viuda de Oesterheld hizo años atrás esta declaración que sí debería explicarse a los alumnos de primaria y secundaria para entender el contexto de la época:

"La bronca se me mezclaba con el dolor, porque yo no podía entender que el hombre con el que habíamos sido tan felices, el escritor pacifista y democrático que había plasmado su amor al prójimo en todas sus obras, hubiera tomado partido por algo violento. Porque aunque él no lo fuera, era cómplice de los que lo hacían y ponía en riesgo a sus hijas. Héctor miraba a los jóvenes que querían un mundo mejor y exclamaba: 'Estos chicos son maravillosos'. Y yo le contestaba: 'Hasta ahí vamos bien, pero no podemos dejar que se expongan'. Si me hubiera escuchado..."

Karina Korob, coordinadora de programas y proyectos educativos de AMIA, hizo una afirmación que sin el debido contexto, como el que da el testimonio de la Señora Oesterheld, es una falsedad peligrosa: "Queremos acercar a los chicos que esto que sucedió nos pudo pasar a cualquiera y por eso es importante recordar para que no se vuelva a repetir".


Ciertamente cualquiera puede ser una baja inocente en cualquier guerra, pero en el transcurso de la guerra declarada por el terrorismo castrista contra la Nación Argentina los daños colaterales fueron mínimos; de hecho considerablemente menores, en número y en procentaje de error, a los que la necesidad entendible del Estado de Israel por prevalecer frente al terrorismo de Hamas y Hezbollah están causando en Gaza.

El punto es que no hay ninguna diferencia sustancial entre los terroristas que volaron la Embajada de Israel y la AMIA y los montoneros que volaron el comedor de la Policía Federal entre muchos otros actos criminales. Son la misma cosa horrenda, por lo que es un contrasentido protestar contra aquellos y lamentar la muerte de estos. 

En el programa, por testimonios de sus familiares, se mencionan los casos de desaparición de Darío Bedne, integrante de la organización terrorista Montoneros,  Víctor Norberto Galuz y Javier Grebel. No dispongo de datos sobre si Galuz y Grebel revistaban o no en en alguna organización terrorista. 

Si la visita al Parque de la Desmemoria fue la memoria selectiva que el programa mostró, si no ofrecen a los alumnos la posibilidad de comprender el contexto con otros datos y testimonios, me gustaría decirles a Ariel Cohen Imach y Karina Korob que no se priven de hacer el despropósito completo: digan también a los chicos que matar terroristas de Hamas y Hezbollah es terrorismo de Estado y no debe volver a pasar...

La Nación Argentina ejerció frente al terrorismo castrista su innegable derecho a ser y prevalecer, el mismo derecho que ejerce Israel en estos días. 

Aquí hace años, kirchnerismo y prevaricato sistematizado mediante en farsas de juicios contra los militares que vencieron al terrorismo castrista, se homenajea a terroristas como si fueran víctimas en vez de enemigos de la Patria y la humanidad. 

En el muro infame de ese parque hay muchos más nombres de terroristas que de víctimas, y allí mismo vimos al entonces Presidente Macri ir con el Presidente Obama a tirar flores al río por los desaparecidos, lo mismo que si hubieran tirado flores al río lamentando las muertes de los terroristas de Al Qaeda. 

Espero que alguna vez, a fuerza de verdad y memoria completa, nadie más haga el ridículo de lamentarse por lo que no debe.

Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.





viernes, 8 de noviembre de 2024

SEGURIDAD: LA INCONTINENCIA COMUNICACIONAL DE PATRICIA BULLRICH Y JAVIER MILEI



Hace unos días, el primero de Noviembre de 2024, publiqué un artículo titulado "PATRICIA BULLRICH, CUANDO EL AUTOBOMBO ES UN MANGUERAZO EN LA FRENTE", criticando la torpeza comunicacional de la ministro de Seguridad en relación a lo que dio en llamarse "El papelón del Efficient", celebrar una detención por tráfico de droga que resultó ser talco para los pies.

Apenas dos días después, Patricia Bullrich volvió a incurrir en la misma torpeza, agravada en este caso por la naturaleza del delito atribuido al detenido que expuso con nombre y apellido. Y todavía hoy, cuando el detenido por error fue liberado a pocas horas de su detención, puede leerse en X el posteo de la ministro: 

ANTES DEL PARTIDO, DETUVIMOS A UN HINCHA PRÓFUGO POR PORNOGRAFÍA INFANTIL

Gracias al programa Tribuna Segura, atrapamos en Rosario a Marco Antonio Centurión, un criminal que violó su arresto domiciliario en Tucumán. Este prófugo, buscado por difusión de pornografía infantil, fue recapturado en una rápida acción de nuestro equipo, y llevado de inmediato donde debe estar: ¡TRAS LAS REJAS!

Nuestra misión es clara: cero tolerancia contra estos criminales. Seguimos firmes en la lucha.

 


Resultó que el prófugo no era prófugo ni estaba bajo arresto domiciliario, ya que había purgado una condena de tres años dictada en 2019 y cumplida en Julio de 2022.

Detener a una persona por error es algo que puede pasar. Y viene pasando seguido. Evitar esas situaciones (aunque siempre habrá casos por el tipo de hechos que a los jueces toca dejar esclarecidos) requiere profesionalidad y prudencia además de una constante revisión de los sistemas operativos que hacen a la Seguridad Interior. 

El punto aquí no es el error en esa u otra detención, sino el agravamiento del error que comete la ministro Bullrich, una y otra vez, con su ya vieja costumbre de zambullirse apresuradamente al autobombo.

Está claro que la ministro no escucha a sus asesores, si es que los tiene y no son obsecuentes, pero hace quedar mal a todo su equipo (donde hay desde elementos muy idóneos a otros que no lo son en absoluto), al no aprender de una puta vez que su gestión sería mejor si aprendiera a no boquear desesperada por el aplauso efímero de su público. 

En este caso brota también el interés de Bullrich por ensalzar al Programa Tribuna Segura. Al respecto recuerdo a los lectores que ese programa se relaciona con la Dirección Nacional de Seguridad en Eventos Deportivos, que Bullrich puso a cargo de Franco Berlín, un estudiante de abogacía que fue su chofer y no acreditaba experiencia ni idoneidad para el cargo, razón por la cual el 26 de Enero de 2024 publiqué: "PATRICIA BULLRICH REPUDIA LA IDONEIDAD Y ATENTA CONTRA SÍ MISMA".

Los méritos de Bullrich, que los tiene y he señalado reiteradas veces, se ven depreciados cuando aflora su voluntarismo y soberbia avasallando la prudencia. Pues en materia de seguridad los funcionarios deben tener la mesura y humildad de sólo hablar cuando los hechos quedan firmemente consolidados, nunca mientras están en curso; como por ejemplo siendo parte de una investigación en proceso.

La torpeza recurrente de Bullrich merece un llamado de atención del Presidente. Pero ahí surge otro problema, que es que el Presidente Javier Milei comparte mucho de esa misma torpeza, como lo dejó claro el 2 de noviembre tras conocerse la intrusión con destrozos a oficinas del presidente de la UCR Martín Lousteau, al postear en X lo siguiente: 

TREMENDA CASUALIDAD
Justo cuando la UBA se niega a que le hagan las auditorias, a 125 le entran en la oficina a destruir evidencia que podría tener la marca de sus dedos...
CIAO !!!

PD: PRINCIPIO DE REVELACIÓN



Infinidad de veces he sostenido que los funcionarios tienen que ser parcos en lo que comunican sobre investigaciones de delitos y sólo opinar cuando los hechos quedan esclarecidos. Ya hasta "me aburro de aburrimiento" por repetirlo. El Presidente no es la excepción a esa regla y Milei no debió hacer públicas sus sospechas sobre un autoatentado de "125" (el kirchnerista Lousteau), debió aguardar resguardado en el "sin comentarios" a que el hecho quede definitivamente esclarecido. Porque el "principio de revelación" que alude finalmente no ha revelado nada más que una sospecha.

Al fin de cuentas el mismo reflejo paranoico de los radicales, y buen parte del resto de la oposición imaginando un Watergate vernáculo, sosteniendo que el gobierno utiliza los servicios de Inteligencia para perseguir a opositores y atentar contra ellos. Todos sospechan a viva voz y algunos, acaso (hermosa palabra la palabra "acaso"), porque cuando fueron gobierno pretendieron desvirtuar la razón de ser de los servicios de Inteligencia haciendo cosas por el estilo.

Sobre la intrusión en las oficinas radicales por ahora hay tres chilenos detenidos. Si son como los cubanos que Gordon Liddy infiltró a oficinas del Partido Demócrata, o mano amiga para en un autoatentado justificar la desaparición de documentación comprometedora, o simples ladrones que intrusaron con expectativas de lo que no había, es algo que debe esclarecer el Poder Judicial.

Y el Poder Judicial, como todos sabemos es otro problema. Un gran problema. Pero ese es un asunto distinto en lo que hace a lo específico de este artículo.

No espero que Patricia Bullrich vaya a cambiar su estilo de pato criollo, para eso debería poder darse una autocrítica a la que aparece reacia. 

Finalmente, siendo que hay muchos fanáticos que continuando la lógica amigo/enemigo exacerbada por el kirchnerismo, confunden toda crítica con interés en ver fracasar la gestión, les aclaro que no sólo voté por este gobierno surgido del acuerdo prebalotaje de Milei y Bullrich, sino que quiero sea el mejor gobierno posible en todos los órdenes.

Y sabe la ministro Patricia Bullrich con que intención la critico. 

El primero de diciembre de 2023, se me consultó de parte de Bullrich si estaba dispuesto a colaborar con la gestión. Respondí que estaba dispuesto a sumarme aportando lealtad desde la "crítica sin contemplaciones" para evitar errores no forzados. 

Es exactamente lo que hago, sin necesidad ni ambición de ningún cargo. Pero no hay peor sorda que la que no quiere oír.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.





lunes, 4 de noviembre de 2024

RAÚL ALFONSÍN, PROXENETA DE LA DEMOCRACIA.




Es tiempo de "desalfonsinizar" la democracia, para hacerla mejor, más decente y más fuerte. 

El pasado 30 de Octubre, coincidiendo con el aniversario de la elecciones de 1983, el Presidente Javier Milei disertó en Córdoba con motivo del 47° aniversario de la Fundación Mediterránea.

En esa ocasión sostuvo que "paradójicamente a Alfonsín lo muestran como el padre de la Democracia, siendo que fue partidario de un golpe de Estado", refiriendo con ello a la caída del Presidente Fernando De la Rúa.

Aquella declaración generó un vendaval de respuestas. En rigor de verdad no se dijo nada que no se haya escuchado antes; pero al paso de los días la polémica, aunque con menos intensidad, sigue abierta.

Me planteo entonces que quizás sea oportuno esbozar una suerte de autopsia sobre el cadáver político del Presidente Raúl Ricardo Alfonsín. Cuestión ciertamente compleja porque más allá de los datos duros es imposible omitir, y sería hipócrita intentarlo, que a quienes éramos jóvenes en 1983 la figura de Alfonsín nos genera sentimientos encontrados.

Para 1982 el Proceso de Reorganización Nacional estaba agotado. Represión mediante afortunadamente había pasado ya el temor a las organizaciones terroristas (ERP y Montoneros, principalmente) y como consecuencia entendible la sociedad ordenaba sus intereses con otras prioridades que el gobierno de facto no atinaba a resolver. La mejora de la economía volvía fuertemente a ser el reclamo cotidiano de mayor intensidad, como lo expuso el paro general del 30 de Marzo de 1982 (al que adherimos los alumnos de 4° año del Instituto Cervantes, aunque por diversión de "rateada colectiva" más que por cualquier otra cosa).

En ese contexto la Junta Militar decidió proseguir con su plan de recuperar militarmente las Islas Malvinas, lo que fue festejado por gran parte de la población y por mí. 

La acción de la reconquista, en lugar de ser un "toco y me voy" para volver al juego diplomático, derivó en la guerra con los británicos.

Hasta ese momento el Proceso dominaba todos los resortes para darle al país una salida ordenada hacia el retorno de la democracia, entre otras razones porque es un relato falso el que se cuenta hoy sobre que la sociedad lamentaba los terroristas desaparecidos y que ello fue clave para el retorno a la democracia. No lo fue ni podía serlo desde que a los terroristas castristas se los quería muertos porque aborrecían la democracia y literalmente mataban por imponer una dictadura comunista con pretensiones de eternidad; igual a la que todavía hoy padece el pueblo cubano. 

La guerra, como siempre ocurre, avivó pasiones patrióticas y tuvo el Presidente Leopoldo Galtieri su momento de brillo. Pero hay algo en la guerra que ningún pueblo perdona a sus "líderes" y eso es la derrota. Mucho más en un país pasional como el nuestro que jamás había perdido una guerra. Y la guerra se perdió, arrastrando en la derrota cualquier posibilidad para el gobierno militar de conducir una transición democrática con condiciones. Si en Malvinas el General Mario Menéndez pudo tachar la palabra "incondicional" del acta de rendición antes de firmarla, en el continente la rendición del Proceso ante los partidos políticos fue lisa y llanamente incondicional. 

Todos, incluyendo militares, estábamos enojados con el Proceso de Reorganización Nacional. Para el 24 de Noviembre de 1983, cuando cumplí mis 18 años, Alfonsín ya era presidente electo.

Creía yo, y quería creer, que el retorno de la democracia -esta vez con la experiencia de todo lo vivido desde 1930 y el peso enorme de una guerra perdida- haría de la República Argentina un país serio como antaño supo serlo y como lo han sido otros países tras perder una guerra.

Deseaba pues el éxito de Alfonsín como necesario para el éxito del país, aunque no lo hubiera votado ni fuera radical (¡vade retro!). 

Entendía que en función de la herencia recibida le tocaba bailar con la más fea y eso le daba, en mi consideración, un amplio margen de error tolerable. 

No recuerdo en qué momento se lo comenzó a llamar el "padre de la democracia". Ese calificativo no me genera nada en tanto sólo refiera afectivamente su condición de primer presidente del retorno democrático. Pero sí me preocupa y molesta cuando se dice queriendo imponer que Alfonsín sea la encarnación misma de la democracia y fueran sus ideas, valores y conducta el parámetro para determinar que tan democráticos somos los demás. Tal cosa la juzgo moralmente inaceptable.

En tal sentido, por sus ideas, valores y conductas Alfonsín no puede ser considerado el padre de la democracia. Más aún, por esas mismas razones encuentro más apropiado llamarlo "el proxeneta de la democracia".

Objetivamente el daño que le hizo Raúl Alfonsín a la República Argentina es enorme. Fue su presidencia el primer gran fiasco de la vuelta a la democracia. El hecho de haber generado una hiperinflación con tal descomposición social que lo obligó a abandonar el gobierno antes de cumplir el mandato, afirmó tempranamente el estigma de que gobiernos radicales son incapaces de llegar a término, debilitando profundamente a la democracia.

Su frase "a vos no te va tan mal, gordito" (acaso antecedente moral =o inmoral= del "¡qué abuelo amarrete!" que diría años luego Cristina Fernández), arrojada intentando descalificar a alguien que protestaba, como subirse al púlpito en la Iglesia Stella Maris para contestar al vicario castrense José Miguel Medina porque se sintió aludido en su homilía, son pequeños indicios que evidencian un Alfonsín autoritario, como el que declaró el estado de sitio en 1985 ordenando detener a 12 personas entre militares, periodistas y el prestigioso analista Rosendo Fraga. 

Porque Alfonsín recitaba el Preámbulo de la Constitución Nacional, pero no pasó de ahí.

Fantaseaba Alfonsín, desde su corazón izquierdista (que en su momento lo acercó al jefe del ERP Mario Roberto Santucho) con que los "Contras" que combatían al sandinismo en Nicaragua conspiraban aquí contra él, creencia que lo llevó a uno de sus más grandes papelones que fue pretender dar lecciones de democracia a Ronald Reagan en los jardines de la Casa Blanca: El Presidente argentino que no terminaría su mandato y dejaría un desastre hiperinflacionario, queriendo aleccionar al Presidente estadounidense que ganaría la Guerra Fría. En fin.

Por ese tipo de delirios ideológicos Alfonsín también debilitó a la democracia argentina no interpretando para dónde iba la historia y  abriendo la puerta para que el Estado se encuentre largamente infiltrado por funcionarios que militando ideologías contrarias a la Constitución Nacional atentan contra su eficiencia, cosa que el kirchnerismo llevó a su paroxismo. Detectar a esos elementos e impedir que hagan más daño es una medida de sentido común.

Alfonsín prostituyó la democracia de muchas maneras, una de ellas fue sembrando el asistencialismo dadivoso mediante la indignidad de la Caja PAN. La volvió a prostituir con la exhibición pornográfica del espurio Pacto de Olivos en el que facilitó al Presidente Carlos Ménem la posibilidad cierta de reelección al módico precio de unos cuantos senadores. Aquella mala reforma de la Constitución Nacional no tuvo así otro interés que ser un negocio de dos.  Corolario de todo lo cual terminó sus días aplaudiendo a la corrupta condenada Cristina Fernández, cosa que le quita cualquier presunción de buena fe a sus muchos "errores" políticos.

Protestan los radicales cuando son llamados prostitutas del peronismo, pero así como en el Pacto de Olivos se alquilaron a Ménem, los alfonsinistas se alquilaron a Eduardo Duhalde haciendo todo lo posible por voltear al inútil de De la Rúa. Alfonsín no es pues el demócrata impoluto que gustan mentir. Sin necesidad de ninguna caminata como aquella con Ménem, fotografiada en la Quinta de Olivos, operó para voltear a De la Rúa: no era cuestión que otro radical terminara su mandato si él no pudo.

En nombre de lo justo, cabe subrayar que el Presidente Fernando de la Rúa no cayó por las operetas golpistas, sino por su propia incapacidad para gobernar que fue la que alentó las operetas golpistas de políticos, periodistas e intereses varios. Personalmente celebré efusivamente la caída de De la Rúa, un presidente que parecía la conjunción política del Alzheimer y la aterosclerosis. 

Por eso a pesar de mucho golpista operando contra De la Rúa, no es del todo acertado referir su caída como golpe de Estado. 

Y ya que la sensibilidad democrática se ha puesto a flor de piel, vale acotar que el último golpe de Estado ocurrió el 19MAR20 cuando por decreto de Alberto de la Fernández se derogó de facto la Constitución Nacional dando inicio a la infeKtadura, de la que también fueron cómplices los radicales.

Alfonsín fue el primer presidente desde el retorno a la democracia, el primer fiasco y fracaso desde el retorno la democracia, cómplice de una mala reforma constitucional y finalmente responsable de muchos males presentes.

Por definición no puede la democracia ser hija de nadie en particular, y afortunadamente no es hija de Alfonsín porque al no serlo es posible desalfonsinizarla para comenzar a eliminar sus vicios.

Y voy a cerrar este escrito con la mayor claridad y mordacidad que me es posible: Raúl Alfonsín lo único que finalmente dejó fue a su hijo Ricarguito...

¿Hace falta decir algo más?


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

domingo, 3 de noviembre de 2024

MENSAJE ABIERTO A ELISA CARRIO POR SU INTIMACIÓN AL PRESIDENTE MILEI




Estado Libre Asociado de Vicente López
Domingo Tres de Noviembre del 2024  


Dra. Elisa Carrió:

Leo el texto de la nota que publica Usted bajo el rimbombante título de "INTIMACIÓN DE CARRIÓ AL PRESIDENTE POR LOS DERECHOS HUMANOS DE LAS MUJERES".

Allí, desde su ego sobredimensionado y presentando una visión complaciente y acrítica de su trayectoria, a la que me referiré mas adelante, patalea su rechazo a la decisión diplomática adoptada por  el gobierno del Presidente Javier Milei de no suscribir la "Declaración sobre la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres", elaborada y consensuada por los representantes de todos los países miembros en oportunidad de celebrarse la reunión ministerial del Grupo de Trabajo sobre Empoderamiento de las Mujeres, en el ámbito del G20.

Argumenta Usted que al no suscribir esa declaración el Presidente Javier Milei está violando la Constitución Nacional. Se trata de un planteo absurdo en tanto supone que la República Argentina ha resignado su soberanía ordenándose suscribir automáticamente cualquier declaración en la que concuerden otros países desde sus propios intereses. 

De ninguna manera es vejatorio de la Constitución Nacional que, a través de definiciones de su política exterior, el gobierno argentino filtre los documentos a los que deba suscribir la República aprobando o descartando esa posibilidad según el caso. 

En ninguna parte de la Constitución Nacional, que Usted dice conocer, hay  mandato alguno de adhesión a ciegas a declaraciones como la que reclama, ni a ningún otro documento internacional. De hecho, si fuera como Usted quiere hacer creer no necesitaríamos cuerpo diplomático, ni Canciller, bastaría con apenas unos burócratas dóciles que vayan a esos "grupos de trabajo" a sonreír estúpidamente y poner la firma. Algo que lamentablemente ha ocurrido reiteradas veces.

En tanto partícipe de la mala reforma constitucional de 1994, surgida del espurio Pacto de Olivos por el cual el Presidente Carlos Ménem obtuvo su reelección inmediata pagando unos cuantos senadores al ex Presidente Raúl Alfonsín, errónea o perversamente llamado "padre de la democracia", intenta chapear Usted como "autora del texto del artículo 75, inciso 22 y 23 de nuestra Constitución".

Pues bien, Usted que acusa al Presidente Javier Milei de no haber leído la Constitución Nacional, demuestra no comprender ni siquiera el significado del lamentable texto de su autoría, que alterando la sabia jerarquía de las normas jurídicas dispuesta por los Honorables Constituyentes Fundadores, concedió rango constitucional a tratados internacionales. 

Siendo la autora del dislate, voy a reconocer que al menos tuvo el tino de no hacer el desastre completo sosteniendo en la cúspide de nuestra pirámide jurídica la Primera Parte de la Constitución Nacional, cuyo articulado no puede ser modificado por ningún tratado internacional.

Luego, entonces, la igualdad ante la ley consagrada en el Artículo 16 en esa Primera Parte de la Constitución Nacional está por encima de cualquier tratado, y más aún -en mi personal opinión como jurista y ciudadano- hace que sea irrelevante por superfluo y reiterativo o distorsivo cualquier disposición añadida a través de tratados internacionales. 

Sobre ese entendimiento y tornando su pataleo completamente absurdo, los incisos que Usted dice haber redactado refieren facultades del Congreso, y el ejercicio de esas facultades no se ve en nada menoscabado por la decisión del Poder Ejecutivo Nacional de, conforme a sus propias atribuciones, no suscribir la declaración en cuestión. Que el citado Inc. 23 ordene "promover medidas de acción positiva" no implica que necesariamente deban ser las que promueva el G-20 ni ningún otro ámbito diplomático. Y esto sin olvidar que las denominadas "medidas de acción positiva" suelen no ser otra cosa que actos de discriminación inversa cuyo único resultado es afirmar estereotipos negativos. 

Si su argumentación jurídica con cargos infundados al Presidente Milei es absurda, la visión sobrevalorada de sí misma que demuestra al decir "con la legitimidad que mi trayectoria académica y política me otorga", es pavorosamente ridícula. 

Su carrera política es un zig-zag de incongruencias con coqueteos a izquierda y derecha, donde si alguna vez defendió lo correcto fue por la misma razón que un reloj detenido acierta la hora dos veces al día.

Su pose de republicana no es más que la farsa de quien corrompió los poderes del Estado cuando, promoviendo la inconstitucional anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final, dio el primer paso hacia la venganza judicial del terrorismo castrista derrotado por las armas; lo que utilización del kirchnerismo mediante como cortina del proyecto de corrupción estructural (el "roban pero encarcelan" que bien supo observar como estrategia del régimen K Jorge Asís) convirtió al Poder Judicial en Poder Prevaricador.

Usted pues no tiene una trayectoria honorable en tanto por causa del prevaricato sistematizado, en "juicios de lesa" donde se niega a los acusados elementales garantías constitucionales del debido proceso para el derecho a la defensa, se encuentran privados de su libertad individuos que no hicieron otra cosa que cumplir con su deber.  

Lo peor del caso es que Usted es consciente del daño que ha causado desde el 2003, por eso declaró ya en 2017: 


Y allí quedó su esbozo de autocrítica, porque acaso habiendo ya sobornado a su cómoda conciencia con decir unas pocas palabras sobre el desastre causado, posteriormente no ha hecho nada para generar el consenso que corrija las injusticias por Usted misma denunciadas y que, de 2017 a hoy, no han hecho más que agravarse.

Gracias a Usted sobran inocentes en prisión y (recordando aquella célebre frase sobre jueces en Berlín), faltan jueces en Buenos Aires. 

Gracias a Usted el más escandaloso prevaricato de la historia judicial argentina sigue inventando causas para apresar cabos y subtenientes. 

No, Doctora Carrió, Usted no tiene argumentos jurídicos ni autoridad moral. Usted ha dañado la República y haría bien en alejarse definitivamente de la vida política argentina; como tantas veces prometió y nunca cumplió.

Sin otro particular, le saludo cordialmente.


Ariel Corbat*, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

*J. Santiago Tamagnone, Abogado (UBA).

¿Qué es la Derecha?

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La Derecha, soy yo.

Ariel Corbat

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