Lo que hace execrable a Carta Abierta no es su alineamiento con el kirchnerismo, sino el modo obsecuente con que los integrantes de ese colectivo se limitan a justificar cualquier cosa que provenga del gobierno nacional. Un intelectual deja de serlo cuando censura su capacidad crítica, cuando argumenta desde las conclusiones. Desde la honestidad del pensamiento el juicio más severo se reserva siempre para los propios, limitarse a la crítica de los otros es traición.
Todo intelectual es, por esencia, proclive a la disidencia. Lógico desde que su función primordial es cuestionar, poner a prueba, pensar y hacer pensar. Repito siempre que si quiero que mis convicciones sigan siendo auténticas necesito revisarlas todo tiempo, tanto desde las dudas propias como desde las razones del otro. Así que nadie debería sorprenderse porque, militando en el Partido FE, deba asumirme como un disidente.
Cuando hice públicas las razones de mi renuncia como vocal suplente de la Junta Promotora del Partido FE de Vicente López, (
ver nota) esperaba que las autoridades del Partido dieran muestras de compromiso con los valores republicanos en juego. El único que tuvo la deferencia de contestar fue Bruno Torrano, Presidente del Partido FE de Vicente López, quien lo hizo sosteniendo que el Acta no fue modificada y que, textualmente, "El Partido es democrático. De hecho, la exclusión del nombre de Venegas del Acta se decidió por mayoría y fue aceptada aún cuando varios no estábamos de acuerdo". Formalmente coincido con Bruno. Comparto que el Acta no se modificó y que el Partido es democrático; todavía. El problema es que Víctor Leguizamón dijo lo que dijo, con la vehemencia con que lo dijo, y sigue siendo el primer candidato a concejal. Digámoslo así, mostró los dientes antes de tiempo y yo no soy tan incauto para confiar que después de Agosto se le va a pasar la prepotencia.
Más allá de Bruno, otras autoridades del Partido FE mantuvieron silencio. Un silencio preocupante por parte de Juan Lucioni (coordinador de la Primera Sección Electoral), Jorge Pirotta (jefe de campaña), y de Gerónimo Venegas (Presidente del Partido).
Sería un gesto republicano más que saludable, ejemplificador, que el propio Gerónimo Venegas se pronunciara instando a que la frase objetada en el Acta Fundacional del Partido FE de Vicente López no pueda estar en esa ni en ningún acta del Partido FE. Me gustaría saber en cuántas actas figura esa expresión que lejos de denotar lealtad es de una obsecuencia repudiable.
El personalismo no puede tener lugar en un Partido que fue fundado para terminar con la "dedocracia". Está claro que no nos oponemos a Cristina Fernández simplemente porque sea "mala", ni creemos que baste con poner en su lugar a alguien "bueno". Somos opositores a este gobierno como consecuencia de ser republicanos, y lo que queremos es una República con solidez institucional.
El Partido FE ofrecía ese rasgo distintivo de querer construir institucionalidad, lo que le daba la oportunidad de mostrarse como un verdadero partido político de los que ya no existen en la República Argentina. Cada discurso de Gerónimo Venegas, como el dado ante el Ateneo de la República, apuntalaba esa idea de conformar un partido con vida institucional y abierto a un espectro amplio de pensamiento republicano. De raíz peronista, sí, pero de amplitud republicana.
Lo ocurrido en Vicente López es una señal negativa respecto a esa finalidad, pero no la única. Otras dos me preocuparon por igual: la renuncia de Magui Tisnés y el libro de Jorge Pirotta.
El 8 de Julio de 2013 Magui Tisnés se desvinculó del Partido FE renunciando como Jefa de Prensa de Gerónimo "Momo" Venegas. Argumentó para ello que "Los motivos que causan mi alejamiento son varios y, muchos de ellos, nacieron hace tiempo, pero ninguno está relacionado con las tareas que hace casi 12 años realizo para Venegas. El desencadenante de mi decisión irrevocable es la incompatibilidad de principios que poseo con varias de las personas que trabajan en la campaña política de Venegas. Desde chica, mis padres me inculcaron valores como la lealtad, la honestidad y el respeto, y siempre ejercí mi profesión en base a ellos. No quiero ver manchado mi buen nombre y honor por acciones que no comparto y que rozan la ilegalidad y que son llevadas a cabo por personas que trabajan en el entorno de la campaña y con las cuales tendría que mantener una relación directa durante el período que dure la misma".
Cuando pasan estas cosas no se puede mirar para otro lado, por lo que reitero aquí públicamente mis felicitaciones a Magui Tisnés por sostener la entereza de sus principios y la claridad de sus palabras.
En cuanto al libro "Apuntes para la campaña - aportes para la discusión y la acción política" de Jorge Pirotta, lejos de apuntalar la idea institucional retoma lo más rancio del movimientismo peronista, como una clara invitación a que se alejen de FE todos los que no sean peronistas. En la concepción del jefe de campaña, el Partido FE no existe como tal. Con esa óptica equivocada FE pierde su mayor capital que es la idea de la institucionalidad.
Si no es el partido de la institucionalidad republicana, FE es más de lo mismo. O menos de lo mismo si se observa el modo en que viene quedando relegado de la escena política. Una sociedad abierta requiere de partidos políticos abiertos, y en tal sentido FE debe ser un partido con mesa de vidrio y las cosas sobre ella. Las normas del secreto no aplican a un partido, y en tal sentido descreo profundamente de la frase de Pirotta "la información es para los artistas que tengan la responsabilidad de manejarla". La ciudadanía está pidiendo a gritos que la política deje de ser impredecible y estar sujeta a los giros caprichosos de los políticos, cuanto más abierta la discusión mayor consenso en las decisiones y menos posibilidad de sapos en el menú. El pretendido secreto dentro de un partido político tal vez confunda al oponente, lo grave es que seguro confunde a los propios. Detesto, también, el concepto consecuente según el cual "la política hay que hacerla con la mayor cantidad de gente posible pero la conducción se deberá ejecutar con la menor cantidad de gente posible". La política debe buscar el mayor consenso, lo otro es usar a la gente.
Salvando otras cuestiones menores, son los puntos ligados a la idea fuerza de la institucionalidad las que me hacen dudar de la viabilidad del Partido FE como proyecto político, pero aquí estoy, dentro del Partido y planteando mis dudas y desvelos con el afán de lograr una República en serio. Queriendo poder decir que somos FE, el partido de los que, priorizando lo institucional, quieren volver a poner cada cosa en su lugar. El Partido que desde las bases de Alberdi, y pasando por la Comunidad Organizada de Perón, interpreta la Constitución Nacional como camino al bienestar y la felicidad del Pueblo.
Se verá si en verdad podemos serlo.
Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
www.plumaderecha.blogspot.com
Estado Libre Asociado de Vicente López