Bruno Torrano - Gente de FE |
Desde su egreso como Abogado de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires (UBA), en 1998, Bruno Torrano ha desarrollado una intensa actividad profesional y académica. Especialista en litigios complejos sobre responsabilidad de producto y acciones colectivas de consumo, es Director de la Diplomatura en Derecho del Consumidor de la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales (UCES).
Más allá del desenvolvimiento profesional, Bruno Torrano es un hombre de familia, lo cual define sus valores y su motivación para actuar en política. Casado y con dos hijos, vive desde hace seis años en La Lucila, localidad del Estado Libre Asociado de Vicente López. Forma parte del valioso recurso humano con que se nutre el Partido FE e inaugura esta sección de entrevistas con La Pluma de la Derecha:
- ¿Cuál es el recorrido que te lleva a la política?
- Cuando terminé el colegio secundario entré al Poder Judicial, y estando en la carrera judicial no se puede pertenecer a ningún partido político, a raíz de ello crecí como profesional sin vinculación con el mundo político. Recién cuando en diciembre del 2000 renuncié al Poder Judicial para ejercer la profesión de abogado comencé a tomar contacto con gente que, por vocación y sentido del deber cívico, estaba en cuestiones políticas, me empezó a interesar y fue darme cuenta que la posibilidad de cambiar la realidad se tenía que canalizar a través de los instrumentos que da la Constitución Nacional, es decir los partidos políticos como instituciones, los órganos y herramientas para acceder a la función pública que permite cambiar la vida de los ciudadanos, como lo que puedo estar haciendo ahora, desde la Gerencia de Recupero de Créditos en el Fideicomiso de Recuperación Crediticia de la Provincia de Buenos Aires, dando una mano para tener una sociedad mejor, donde la ciudadanía tenga un mayor bienestar y, en definitiva, para que el mundo que le estamos dejando a nuestros hijos y nietos sea mejor que el que tenemos nosotros.
- ¿Tu definición ideológica cómo la expondrías?
- Pragmático. Yo soy de derecha en función de las personas que se van demasiado a la izquierda, y de centro izquierda en función de los que se van demasiado a la derecha. Creo que cuando la gente es buena se puede convivir y hacer cosas en beneficio de la sociedad, por más que se piense ideológicamente diferente. Creo que el problema que tenemos hoy en día, más que la ideología, es que estamos contaminados de gente ineficaz y de mala fe, entonces ahí la ideología queda de lado y el que sufre es el país. Uno tiene que juntarse con gente buena y no tanto estar pensando en la afinidad de pensamiento. El mundo está cambiando, la tecnología, la vida diaria de los ciudadanos, los países cambian a un ritmo vertiginoso y en este cambio hay también un cambio de paradigmas y de pensamiento. Ante estos cambios, el mejor resguardo de uno es aferrarse a la familia, la Patria, porque estos cambios alocados pueden terminar en cualquier cosa, como vemos ahora las rebeliones en el norte del África o en otras partes de Asia Menor. Volver a los orígenes es volver a los abuelos, volver al país y volver a buscarse a sí mismo.
- ¿Qué referentes doctrinarios tenés?
- Los referentes son más o menos los que tenemos todos. Es imposible no empezar por Juan Bautista Alberdi. Después lo que hizo Sarmiento en la función pública fue ejemplar, y nos venimos a los tiempos modernos, aunque parezca contradictorio, Juan Domingo Perón. Tanto Sarmiento como Perón dejaron muchas cosas para la Patria, hoy vemos gobernantes que no dejan nada para la Patria, ni pensando diferente ni pensando igual. Y en lo que tenemos hoy creo que tenemos que circunscribirnos a pocas ideas, concretas, efectivas y sólidas, y cuando nosotros nos vinculamos con el Partido FE a través de su principal referente que es Gerónimo Venegas, vemos que es una persona de ideas muy claras, muy fuertes, de pilares básicos y concretos, no es una doctrina que avasalle por lo gigantesco o la complejidad, son pilares básicos de gente de sentido común y buena fe, esos pilares son los que sustentan la Patria y están en la Constitución Nacional.
- O sea que adherís a la idea según la cual el proyecto nacional es la Constitución Nacional y no hay mucho que andar inventando.
- Sí, y sería un suicidio cambiar la Constitución Nacional. Y no hablo solo de la re-re, porque tocar la parte dogmática sería tocar las raíces del árbol, se pudre el árbol, el país creció y tiene su fuerza en la parte dogmática de la Constitución Nacional y eso no puede ser tocado, no se puede cambiar nuestra Constitución por una constitución indígena o latinoamericana. En 200 años de vida, el país creció apoyado en esos artículos de la parte dogmática, si se saca eso que son los cimientos de la casa se viene todo abajo.
- ¿Cómo te acercaste al Partido FE?
- Yo tenía relación con alguna gente vinculada al Momo. Lo conocí en un desayuno de la Asociación de Dirigentes de Empresa y me encantó su discurso, me pareció una persona muy sencilla y muy humana, con conceptos muy claros. A medida que hablaba yo veía que coincidía y que el discurso de él era el que yo quería dar, y comencé a ver también que estaba rodeado de gente con la cual yo coincidía y con la que uno tenía puntos en común como para empezar a trabajar. Me acerqué, me sentí cómodo y creo que es trascendental volver a la vida política, como existía en Roma o en Atenas, que el pasatiempo de la gente sea la política para que haya interés por los asuntos de la sociedad y los problemas del prójimo. Esa es la manera de evitar que la política quede en manos de pocos, desde esa concepción creo que la única forma de democratizar la política es volver a tener vida política. Cómo había hace muchos años, cuando en la mesa familiar el padre hablaba con los hijos de política y se hacía educación cívica en la casa. Hoy por hoy los padres, por ahí, hablan con los hijos de Tinelli o de fútbol, y no hablan de cuestiones que tienen que ver con el país. Es necesario que el país vuelva a tener unidades básicas, comites, centros de debate y de pensamiento abarcando a todos los estratos. El fin en sí mismo de la política debe ser participar de la construcción del país, la vida política no es para garronear algún cargo, sino para participar de la construcción del país, ser parte, ese es el verdadero incentivo y orgullo de actuar en política. La vida política está vinculada con cuestiones históricas, sociales y familiares, eso es lo que nutre a la sociedad porque sino la sociedad queda restringida al fútbol y a Tinelli.
- En ese sentido, claramente el Partido FE tiene una apuesta fuerte en lo institucional, que hace que no se hable de candidaturas hasta que no se esté consolidado institucionalmente.
- Y eso es lo sano, porque el que se queda es porque le gusta la vida política. El que vino a buscar una candidatura se aburrió y se fue después de cuatro meses. Todo se construye y nadie sabe que pasos electorales va a dar el Partido FE, esa incertidumbre hace que el que se acerca es porque quiere colaborar antes que lograr un puesto determinado, para eso están otros partidos que se ofrecen como sellos de goma. Acá, en plena génesis, la expectativa y el entusiasmo está puesto en participar por el bien público.
- Sos el Presidente de la Junta Promotora del Partido FE en Vicente López, ¿cómo está el armado partidario en el distrito?.
- En el distrito estamos creciendo, y cuando se crece ocurre lo mismo que con las personas, el chico que pega el estirón no controla bien su cuerpo, se choca, no domina su fuerza ni entiende del todo lo que le está pasando, y a nosotros nos pasa eso. Estamos nutriéndonos de personas que a veces nos comprendemos, a veces no tanto, pero sí sabemos que todos tenemos un mismo objetivo que es armar una fuerza que va a tener como núcleo a la institucionalidad. Y para eso hay que aprender a convivir, aceptar opiniones diferentes en el Partido, acatar las decisiones por mayoría y nos gusten o no esas decisiones saber que esa es la vida del Partido. A veces en reuniones somos cinco y otras veces cincuenta, lo mismo saliendo a timbrear, algunos vienen regularmente otros no tanto, pero seguimos creciendo y seguramente para el 2013 vamos a tener un a lista propia y para el 2015 nos vamos a conocer mucho más, en lo personal y en lo político. Como todas las relaciones humanas un partido político también necesita tiempo, un tiempo de maceración para poder armar una cosa fuerte, y así será en la medida que obremos bien y participemos en política, como lo estamos haciendo, con la vista puesta más allá de los resultados inmediatos.
- Concretamente, ¿qué cosa es lo que te motiva?, eso que puntualmente quisieras que cambie en Vicente López.
- Lo que a mí me motiva es que se puede hacer todo mejor. En mi trabajo me pone frenético que las cosas se hagan mal, porque quiero que se hagan bien y el esfuerzo de hacerlas mal es casi el mismo del hacerlas bien, no hay mucha diferencia en horas y en desgaste, entonces ¿por qué hacerlas mal?, lo mismo pasa en Vicente López. En otro contexto, la función pública tanto del anterior intendente (Enrique García) como del actual intendente (Jorge Macri) deja falencias en todos los aspectos. Las calles no están abandonas, pero están mal mantenidas. El tema de la poda, está abandonado. El tema de la seguridad, es una pantalla pero en realidad no hay trabajo serio, no hay un mapa del delito, ni tareas de contención ni de prevención, sino una pantalla de poner personas que eran empleados municipales, ahora disfrazados con mamelucos, en una esquina porque en principio daría un poquito más de sensación de mayor seguridad. En salud se han cerrado un montón de unidades primarias de atención que para la gente eran muy importantes, porque no todo el mundo tiene obra social, no todo el mundo tiene una prepaga, en especial la población adulta mayor, que a veces tiene PAMI pero los centros de atención de PAMI quedan lejos, y que ante cuadros de un pequeño resfrío o leve gripe, que puede desencadenar algo más complejo en personas grandes, podían ir a una unidad de atención primaria de las que se han ido cerrando, o las especialidades que se han restringido al médico clínico. Este gobierno hace más hincapié en las cuestiones de alto impacto publicitario y poco en lo que tenga que ver con el trabajo efectivo para el bienestar de la gente, mucha campaña poca gestión. Creo que eso puede ser superado, y no ser superado para ganarle a otro sino para que la gente esté mejor con un trabajo serio y responsable. Entonces ¿por qué no hacer el esfuerzo? Si resto horas a mi familia es para tener la conciencia tranquila de saber que hago algo por un Vicente López mejor. Si la gente nos apoya seguramente haremos un Vicente López mejor, si no logramos ese apoyo yo igual dormiré tranquilo sabiendo que hice lo que tenía que hacer y propuse cambios frente a la realidad y lo que estuvo a mi alcance lo hice. Uno cuando está en esto no hace lo que quiere sino lo que puede.
- ¿Cómo llegás a Vicente López?
- Yo nací en un pueblo muy chiquito de la Provincia de Buenos Aires que se llama Martínez de Hoz, y queda en el Partido de Lincoln. Ahí crecí, con un petiso, un perro y jugando al fútbol en el medio del campo. Después, a la hora de estudiar, buscando un buen colegio vine a vivir con mi madre y mis hermanas en un departamento del centro de la Ciudad de Buenos Aires, en Viamonte y Callao, hice la primaria y la secundaria en el Colegio Salvador. Después, cuando me casé, vivimos con mi mujer en un departamento en Belgrano, y luego buscando algo que diera a nuestros hijos la posibilidad de una infancia teniendo un animal y viendo el sol, cosa que en un departamento se restringe, nos mudamos a La Lucila donde teníamos amigos. Ya hace más de cinco años que vivimos ahí, muy felices y contentos.
- ¿El proyecto es continuar viviendo en el Estado Libre Asociado de Vicente López?
- Sí, sí, sí... Creo que de acá no nos vamos más. Incluso si al crecer los chicos la casa nos queda grande y decidimos mudarnos a algo más chico, sería dentro de Vicente López.
Bruno Torrano, gente de FE.
Tenemos FE en la Patria, FE en la Libertad.
El futuro es nuestro.
Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
Estado Libre Asociado de Vicente López