domingo, 30 de junio de 2019

SUBVERSIÓN DE BANDERAS POR TRAPOS


EL ENEMIGO FUE CUBA, Y LO SIGUE SIENDO

En Enero de 2018 la agrupación de abogados BLOQUE CONSTITUCIONAL denunció ante la Cancillería que el embajador de Cuba en Argentina, Orestes Pérez, bajo pretexto de “solidaridad” incumple la obligación de no inmiscuirse en los asuntos internos del país a través de  la denominada "Propuesta Tatú" (así llamada por el apodo del criminal Ernesto Guevara en el Congo). Mediante esa fachada, se difunden las “bondades” de la “revolución cubana”, de sus movimientos guerrilleros y el culto a la personalidad de Ernesto Guevara, no siendo ajena a la toma de tierras y otros conflictos de las zonas en que eligen activar; llegando al punto inadmisible del adoctrinamiento comunista de niños argentinos. Y esa es apenas una de las operaciones que Cuba activa en Argentina. 

El gobierno del Presidente Macri ignorando la denuncia no tomó ninguna medida para poner fin a esa intromisión extranjera. Y por supuesto aprovechando la pusilánime permisividad las cosas se agravaron.  

Así, el 20 de Junio de 2019, la Escuela Pública de Gestión Social Nº2 del barrio Emerenciano en Resistencia, Chaco, izó en el mismo mástil la Bandera Argentina junto con la cubana homenajeando al terrorista Ernesto Guevara. Queda claro que la tiranía cubana y su terrorista estrella, que fue ajusticiado intentado invadir Bolivia, representan todo lo contrario del estilo de vida argentino tal como lo establece la Constitución Nacional y, por lógica, no debe tolerarse que sean impuestos como modelo a los estudiantes argentinos.

Menos aún cuando, lejos de ser espontáneos, actos de tal índole vienen orquestados desde La Habana, que sigue manteniendo operaciones de infiltración al estilo de la Guerra Fría ejecutados desde la embajada en Buenos Aires. De hecho, en ese acto estuvo presente el hermano del Che, Juan Martin Guevara, otro elemento vinculado al embajador castrista.

La embajada de la tiranía parasitaria cuenta con una gran red de serviles locales que incluye agrupaciones políticas de izquierda, organizaciones sindicales como la CTA, las supuestas organizaciones de derechos humanos e infiltrados en estructuras estatales incluyendo la sumisión del gobierno socialista de la Provincia de Santa Fe como otros de extracción kirchenrista. Y si en la década del 70 Cuba atacó a la Argentina dirigiendo organizaciones terroristas, Montoneros y ERP principalmente, hoy lo sigue haciendo a través de la cultura y la política en procura de arrastrar a la Nación Argentina bajo su dominio. 

Con el fracaso de la Unión Soviética, la intelectualidad comunista comprendió que el proletariado aprecia más la oportunidades del capitalismo que la lucha de clases, por lo que busca al nuevo sujeto revolucionario en cualquier conflicto que pueda fogonearse dentro de sociedades capitalistas explotando sus contradicciones. 

En el caso argentino la tienen particularmente fácil, porque el "entrismo" comunista tantas veces repelido por el peronismo, a fuerza de discursos y tiros, consiguió finalmente doblegar a la ortodoxia peronista dando lugar a doce años de kirchnerismo, régimen ignominioso que llevó adelante un proceso orwelliano de desmemoria y control social, al que le sucede un gobierno progre, incapaz de comprender la batalla cultural e involucrarse en ella.

INEPTITUD Y COBARDÍA

No es casualidad que el mismo día que en Chaco se izaba la bandera cubana cantando al Che Guevara, por segundo año consecutivo el Presidente Mauricio Macri no se atrevía a encabezar en Rosario el acto oficial por el Día de la Bandera. La cobardía con que se acepta la imposibilidad de garantizar la seguridad del Presidente refleja la falta de convicción para afirmar la identidad nacional y las instituciones. A tal extremo, que unos días luego de aquel repetido papelón, en el propio Ministerio de Seguridad de la Nación se pudo ver flamear con pretensiones de bandera un trapo de dominio cultural marxista completamente ajeno a su misión.



Los mismos inútiles que no pueden garantizar la seguridad del Presidente de la Nación en el acto oficial por el Día de la Bandera, exhiben su incompetencia equiparando un trapo a la enseña patria. Otro mamarracho al que se llega por no entender que el enemigo existe y juega.

En este punto conviene recordar que siendo funcionarios de este gobierno Juan José Gómez Centurión y Darío Lopérfido, lo mismo que el legislador bonaerense Guillermo Castello, se plantaron contra la mentira de los 30.000 desaparecidos y todos ellos debieron irse de CAMBIEMOS. Ahora y con la misma verdad, el ministro de Educación Alejandro Finocchiaro repudió el izamiento de la bandera cubana en un acto escolar y aseguró que Ernesto "Che" Guevara fue un "criminal genocida". ¿Cuánto tardará en salir del gobierno?

La hipocresía activa de los comunistas sobre la zoncera de los progres debilita los criterios institucionales de la Argentina, entorpeciendo con ello la resolución de conflictos reales y dando entidad de tales a otros que son enteramente artificiales. El significado de la palabra "subversión", que ningún político argentino se atreve siquiera a pronunciar y tampoco a pensar, por el miedo ridículo a descubrirse videlista (a ese extremo se ha vaciado de contenido el lenguaje en tiempos de imbecilidad inclusiva), es la acción y el efecto de subvertir, trastornar o alterar algo, especialmente el orden establecido.

EL ORDEN ARGENTINO

Argentina fue pensada para vivir bajo la irrestricta supremacía de la Constitución Nacional, todo lo que pretenda imponerse por fuera de su marco jurídico e ideológico es subversión del orden establecido. Es preciso tener claros esos conceptos, porque permiten mantener bien orientadas las acciones al interpretar correctamente el deber ser de las funciones públicas para garantir con ello la convivencia social. 

Así el Escudo, la Bandera y el Himno son símbolos de la soberanía de la Nación Argentina y de la majestad de su historia, como también -por supuesto- de su ordenamiento jurídico.

Miles de argentinos en nuestro territorio y más allá de él, han dado su vida en combate para mantener ondeando la Generala Albiceleste. Y no sólo argentinos, también extranjeros, como el Coronel Davian, corsario que murió protegiendo el pabellón azul y blanco en los lejanos altos rocosos del puerto de Trujillo, sobre el Caribe centroamericano. Toda la sangre tributada por el honor y la gloria de la República Argentina hace al orgullo de la Nación. La fama de unos y el anonimato de otros es meramente circunstancial, la Patria en todos ellos. 

Y justificando esas muertes está la vida, porque la Bandera Nacional representa un estilo de vida basado en la Libertad, instrumentalmente propiciado por la Constitución Nacional. Donde ondea la Generala Albiceleste hay un "deber ser" de Libertad. Ese mismo "deber ser" que atrajo inmigrantes de todo el mundo, como hoy cobija a venezolanos escapados de la dictadura comunista que sobre el triste Caracas esparce luto, llanto y muerte igual que cuando López y Planes escribió el Oíd Mortales.

Comprender lo que la Bandera Nacional representa, hace totalmente ofensivo que se pretenda equipararla a la de una dictadura o a cualquier andrajo de facción. Ofende que con motivo del denominado "día del orgullo gay", o "día del orgullo LGTB" por la cada vez mayor especificación de preferencias sexuales, distintas dependencias púbicas, perdón!: públicas; cediendo al lobby de minorías hiperactivas organizadas para imponer la ideología de género y al progresismo como nueva religión oficial, exhiban en su frente el trapo multicolor. Es la misma sobreactuación progre que colgó harapos verdes a favor del aborto irresponsable, y otra manifestación del más absoluto desprecio hacia los criterios institucionales que surgen de la Constitución Nacional. 

En la plena vigencia de la Constitución Nacional, que representa y exige la Bandera creada por Manuel Belgrano, están contemplados todos los derechos posibles a los que cualquier habitante de la República Argentina puede aspirar. Ni más ni menos. Con total independencia de cualquier parcialidad de pertenencia. Dar entidad oficial desde el Estado a los trapos de facción, lejos de promover la igualdad de derechos y obligaciones, apunta a consolidar los incumplimientos constitucionales de la casta política; la cual se fortalece con la confusión y defiende sus propios privilegios segmentando arbitrariamente los derechos con inadmisibles preferencias de regímenes especiales y tutelajes varios. 

Desde lo simbólico hasta lo fáctico, desvirtuar las instituciones tiene efecto negativo sobre la calidad de vida y afecta la convivencia con preferencias irritantes. El Estado no debe estar disponible para los caprichos de los funcionarios, ni doblarse frente a grupos de presión, porque su función no es satisfacer demandas sectoriales según la fuerza de la campaña que lo demanda, sino cumplir y hacer cumplir la Constitución Nacional. Eso y ninguna otra cosa. 

Y la mayor demostración de la estupidez estatal, consentida por este gobierno, es que al contraponer a la Generala Albiceleste con el trapo multicolor, en lugar de integrar afirman que los homosexuales no están representados ni amparados bajo nuestra Bandera y por eso necesitan de otra. Lo cual es tan absurdo como ofensivo para el amor de Patria, que en nada cambia por preferencias sexuales. 


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha, 
un liberal que no habla de economía. 

jueves, 27 de junio de 2019

SERIEDAD INSTITUCIONAL, ESA ENVIDIABLE CONSTANTE CHILENA


El marcado contraste institucional entre Chile y Argentina se vio bien reflejado en los respectivos traspasos de mando presidenciales de 2013 y 2015. 

Los chilenos, mostraron orgullosamente al mundo su condición de país civilizado cuando el entonces Presidente Sebastián Piñera llamó a la Presidente electa Michelle Bachelet generándose un diálogo admirable, que no podía más que infundir tranquilidad y certeza sobre el futuro de Chile. 

Todo lo contrario de lo acaecido en Argentina cuando Cristina Fernández, admiradora de Fidel Castro y su tiranía, se negó a participar de la ceremonia del traspaso de los atributos presidenciales a Mauricio Macri, despreciando por completo la voluntad democrática de las urnas y a las instituciones republicanas; lo que no hizo más que consolidar esa constante incertidumbre en la que vivimos los argentinos. 

Siendo parte de una generación que, marcada por el conflicto del Beagle y la posterior Guerra de Malvinas, consideró enemigos a los chilenos, asumir que la seriedad institucional de Chile es un ejemplo a seguir ha sido para mí una enseñanza dura. 

Sería una obstinación estúpida no reconocerlo: Son desde hace décadas un país más serio que nosotros. Supieron tener una salida ordenada del gobierno militar y sostener políticas de Estado. Así, además de continuidades económicas básicas, a ningún político chileno en el poder se le cruzó por la cabeza desmantelar sus Fuerzas Armadas; imbecilidad que Alfonsín y Caputo iniciaron en la Argentina.  Y que el miserable de Caputo reivindicó como un acierto hasta el último de sus días...

Comandos del Ejército Argentino participando de la
Competencia Fuerzas Comando, Chile 2019.
Hoy Chile es un país que provee a su propia Defensa adquiriendo elementos modernos, mientras nosotros hemos perdido capacidades en forma trágica, al punto de contentarnos con recibir rezagos militares, ya no del primero sino del tercer mundo.

Este año Chile ha sido sede de la 15ª edición de la Competencia Fuerzas Comando, que anualmente organiza el Comando Sur de los Estados Unidos (USSOUTHCOM) y que, por décima vez, ganó el aplicadísimo equipo de Colombia. Y aquí también surgen elementos para apreciar la fortaleza institucional chilena. 

En el desarrollo de la competencia, el equipo chileno, prácticamente tuvo agarrado por la sombra al equipo de Colombia, llegando a estar a una distancia mínima de cinco puntos. Y ahí, cuando un simple error acarreando una penalidad podía significar el batacazo chileno, se pudo apreciar la concentración que hace del 10 veces campeón un relojito de precisión, porque inmunes a la presión volvieron a despegarse en las últimas pruebas.

Por primera vez. Argentina envió a la competencia comandos del Ejército Argentino, quienes finalizaron en el puesto 14º (entre 19). En ediciones anteriores nuestro país fue representada por el Escuadrón Alacrán de Gendarmería Nacional, que cerró su participación en Panamá 2018 en el 10º lugar (entre 17). 

Resultados finales de la Competencia Fuerzas Comando
Chile 2019.

En 2016, compitiendo en Perú, donde también ganó Colombia, Argentina y Chile compartieron el 7º puesto. La referencia es útil para entender que no hay nada casual en el notable desempeño del equipo chileno como local, obedece a la seriedad con que se preparó para el evento, a la manera colombiana: competidores con experiencia, tiempo, adquisición de armamento, disponibilidad de munición, elementos de práctica y el apoyo del Comité Olímpico de Chile con psicólogo deportivo y kinesiólogo incluidos. 

Si bien es cierto que difiere de un país a otro la relevancia que se le otorga a la participación en la competencia, también es necesario ver en ella indicadores de fortaleza institucional.  Así, por ejemplo, Colombia valora mucho el desempeño de su equipo, al punto de interesar directamente al Presidente de la Nación, y sostiene el empeño a través del tiempo. En otros países el interés es menor, y en algunos casos meramente protocolar.

Una competencia es sólo una competencia, por lo que la idea de tener un equipo dedicado exclusivamente a ella puede ser objetada como una deformación de la misión institucional. Considero un criterio válido que el equipo se presente con la preparación de rutina, la misma que le sirve para cumplir cotidianamente con sus deberes. 

Pero algo es indudable: si bien una competencia sólo es una competencia, tener en claro el sentido específico de la función hace al orgullo institucional, y cuando eso se pierde se valora más un evento de cocina que uno militar. 



Argentina tiene que empezar a valorar, en todos los órdenes, el pensar y actuar con sentido institucional.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha.
Estado Libre Asociado de Vicente López.

domingo, 23 de junio de 2019

¿QUÉ DESEAN REALMENTE LOS ARGENTINOS?



No soy más que un individuo con su opinión y un voto.

No soy gurú de nadie.

Un individuo, una opinión, un voto. Sólo eso.

Y los dueños de la verdad y la sabiduría,
que se atribuyen la curiosa virtud de ser la única opción posible,
 me dedican su intolerancia...

Temen.





Tras el cierre de listas de candidatos para las PASO, el 22 de Junio de 2019 debería ser recordado como el "Día de la democracia fallida". 

No hay ningún candidato, ni uno, que lo sea por el voto de los afiliados de su partido en elecciones internas. 

Así es como la representatividad se encuentra viciada desde su base: por la falta de vida institucional en los partidos políticos donde los afiliados no tienen ni voz ni voto. Y en la voluntad evidente por mantener ese vicio, evitando cualquier intento de sanear la representatividad, se manifiesta consolidada la mutación de la dirigencia política en casta.

Esta casta política, en defensa de sus privilegios, mantiene un sistema electoral ajeno a la ética republicana, lo que no es más que una ficción del sistema representativo que dispone la Constitución Nacional en su artículo 1º. Vamos a las PASO, obligados por una ley hipócrita y decorativa, cuya única finalidad es fingir un vínculo inexistente entre supuestos representantes y representados. Dilapidando en ello muchísimo tiempo y dinero, recursos siempre escasos de los que el país no dispone.

Las PASO no son un logro de la democracia, sino la expresión más obscena de su usurpación y vaciamiento; la patética burla a la ilusión democrática de 1983 devenida en frustración consuetudinaria.  

Esta puesta en escena es un decorado democrático que sólo sirve a las camarillas políticas con sellos de goma que desaniman la participación ciudadana. Pero esa voluntad de casta, de club cerrado que hace a la perpetuación de una misma dirigencia, no sólo en personajes sino en métodos y cultura, no libra de culpa al ciudadano que ante los obstáculos se retrae de la política: un pueblo de conciencia débil y voluntad conformista, resignado, se merece la representación de esa dirigencia execrable que, privilegiando su propia conveniencia, no da muestras de creer en otra cosa que no sea su última mentira.

No hay indignación cívica frente a la escandalosa falta de convicciones y palabra que exhiben los políticos de la casta. Si el oficialismo recluta a Miguel Ángel Pichetto, Sergio Massa vuelve al totalitarismo kirchnerista, o Jorge Macri violenta su compromiso (público y firmado) de no postularse a un tercer período como intendente de Vicente López, no hay ningún reproche, ninguna sanción por la inconducta. Cualquier cosa es posible y todo vale. La falta de honorabilidad es lo corriente.

Las listas de la casta política confirman que la decadencia argentina seguirá por al menos otros cuatro años. Sin honestidad intelectual, sin ideas ni principios que aspiren al bien común, esos nombres para el gasto de las PASO muestran no entender que el país necesita instrumentar una austeridad republicana tal que haga parecer hedonistas a los espartanos y la vuelva parte de su cultura. La batalla cultural es volver a la racionalidad del país pensado y regido por la Constitución Nacional, que intente resolver sus problemas en lugar de acumularlos. 

Pero además de conservar afanosamente sus propias miserias, la casta política se dedica a evitar que se activen los anticuerpos de la sociedad. En estos días las operaciones contra las candidaturas de Juan José Gómez Centurión y José Luis Espert, fueron mucho más que la pasiva resistencia del ninguneo periodístico y mediático pretendiendo encapsular a los outsiders de la política en el estereotipo de lo inviable. Hay un pronunciado rechazo de la casta a la reacción por derecha, la única que no le es funcional desde que la cultura imperante es el fundamentalismo progre, que tiene por libro de cabecera el diccionario de la corrección política escrito por la izquierda.



Escucharlo a Aseff, defender lo indefendible de su traición de última hora contra Espert, argumentando que el país no quiere que los dirigentes políticos estén peleados entre sí, demuestra que esta democracia no es tal, sino un club cerrado y grotesco a medida de personajes incapaces de sostener su palabra.

La política no está puesta al servicio de la Patria ni del pueblo, sino al exclusivo beneficio de la casta política que se reparte cuotas de poder con el único fin de preservarse. No hay República, ni democracia, tampoco una clase dirigente aristocrática. Son eso que vemos en las listas confeccionadas a dedo según el mandamás de cada camarilla, y que luego se darán un barniz democrático con la farsa de las PASO; para que parezcan representan algo más que el interés de la casta.

La Constitución Nacional, dispone desde la reforma de 1994 en su Art 38, que "Los partidos políticos son instituciones fundamentales del sistema democrático", pero al cierre de las listas lo único "fundamental" son los dedos que ungen candidatos. No tiene intención la casta política de cumplir y hacer cumplir la Constitución Nacional, ni de asumir la realidad de los problemas del país, por eso no se habla de la reforma estructural y funcional del Estado, ni se habilita una revisión legal del sistema electoral y de partidos para sanear la representatividad desde el protagonismo de los afiliados. La miserable mezquindad de la casta política argentina, que es apreciable todos los días, exhibe a estas horas la desesperación por mantener sus privilegios a costa del fracaso del país. 

La casta política está de fiesta, una fiestita que nos cuesta de arranque $ 3.000.000.000. A puro dedo providencial y rosca de camarillas. Somos un país esclavizado y a la deriva.

Y en este panorama donde las alternativas parecen reducirse a dos, Ezeiza para los jóvenes y Chacarita para los viejos, la pregunta realmente difícil de responder es ¿qué desean realmente los argentinos? No tengo la respuesta. Repudio a los que votan una manifiesta asociación ilícita, y no entiendo  a los que se conforman con un presidente cobarde, que en lugar de poner el cuerpo en el acto por el Día de la Bandera se escondió en un ámbito cerrado rodeado por chicos de escuela primaria (lamentable maniobra antiprotestas).

Finalmente aborrezco a ambos, porque por mucho que alardean de ser distintos no se repelen entre sí, cosa que harían si fueran incompatibles. Por el contrario, se apoyan mutuamente para seguir existiendo. 

Al contexto de apatía cívica pareciera, como alguna vez observó Lavalle durante la dictadura de Rosas, que los esclavos están muy contentos con sus cadenas. No hay un horizonte ideal ni aspiración alguna de llegar a él en la generalidad de la población, ni anhelo colectivo de superación en las masas, ningún pensamiento organizado y estructurado como camino de realización. No hay dirigencia, ni hay política. 

Simplemente hay, amén de algunos pocos quijotes, muchísimos mendigos que esperan levantar alguna migaja en el festín del neofeudalismo. La casta tal vez haya logrado dañar las instituciones y degradar la cultura del país en tal medida que no haya nada que esperar, como si a aquella Nación orgullosa que cantaba el Oíd Mortales se la hubiese llevado el viento.

Asumamos que llegamos a esto por idiotas. Porque, al fin de cuentas, el país sigue siendo el mismo que hizo grande la Generación del 80, y no por ser lumbreras que lo hemos convertido en la tierra de los nadies. Debemos ser idiotas si de 1983 a hoy no hemos hecho otra cosa que decaer. 

Entonces seguimos en el mismo dilema del 2015, viviendo otra vez nuestro día de la marmota. 


ROBAR AL VIENTO

Iba a exiliarme en un país de recuerdos,
de leyes sabias y glorias pasadas,
pero era marchar con Lavalle a la locura,
pretender ser Alberdi o un Sarmiento;
aquella, mi Patria, se la ha llevado el viento.

Quizás vaya a buscar el calor de otro fuego
aquí me hiela un frío de almas vacías,
de perfidias urdidas por mentes oscuras,
si cualquier verdad no es más que lamento
la vida no es vida sino un tiempo mugriento.

Me rescatan palabras, tan sólo palabras,
retintas de sangre, mi propia sangre,
que pintan escenas mejor que la pintura
y no queda chance de extrañamiento;
sigo aquí, emboscado, para robar al viento.

(24JUL15 - 15:45 hs)



Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía. 


domingo, 16 de junio de 2019

UNO NOVENTA (un cuento breve)



De alguna manera el tipo quería hacer que los demás en la mesa nos sintiésemos afligidos por sus limitaciones, así que escucharlo era un compendio de lamentos por todo lo que le hubiera gustado ser y no pudo.

Lo molesto del asunto es que se victimizaba, al extremo de marginarse de la responsabilidad por sus propias decisiones.

Terminó de hablar y nos miró como esperando una piadosa absolución.

- Te entiendo perfectamente -le dije y agregué-, imaginate que yo siempre quise ser jockey, otro Leguisamo.

El fulano se ofendió. Los demás no pudieron contener la carcajada.

Si de inventar cicatrices se trata ni siquiera hace falta un corte.


Ariel Cobat, La Pluma de la Derecha, 
un liberal que no habla de economía.

OTRA OPERETA COMUNISTA CONTRA PATRICIA BULLRICH


DENUNCIA CON TUFO BOLCHEVIQUE

APDH - un plan de acción comunista.

La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos (APDH), entidad que propala tanto la mentira de los 30.000 desaparecidos como la fantasía morbosa de la desaparición forzada de Santiago Maldonado, ha presentado una denuncia penal contra funcionarios del Ministerio de Seguridad de la Nación. 

Acusa la APDH a Patricia Bullrich, Pablo Noceti, Gonzalo Cané y Gerardo Milman, por la supuesta existencia de "un plan criminal coordinado desde la más alta esfera del Estado, con el objetivo de llevar adelante un accionar represivo premeditado contra las distintas comunidades mapuches". 

La descabellada denuncia pretende servirse del Poder Judicial en procura de debilitar al Estado Nacional frente al Conflicto RAM (Resistencia Ancestral Mapuche). Se busca con ella replicar y consolidar la construcción absurda de los llamados "juicios de lesa humanidad", en los que juzgando hechos fuera de su contexto histórico, omitiendo la acción del terrorismo castrista, violentando las garantías del debido proceso y la irretroactividad de la ley penal, tuvo el enemigo derrotado por las armas su revancha judicial logrando encarcelar y condenar a quienes impidieron se replicara en Argentina la dictadura comunista que, con anhelo de eternidad, sigue hoy oprimiendo al pueblo cubano y parasitando los recursos de Venezuela, colonizada hasta la miseria. 

Todavía la sociedad argentina no ha cobrado conciencia de la grosera nulidad de esos juicios, ni del daño que han hecho tanto a la Defensa y Seguridad de la Nación como al estilo de vida propiciado por la Constitución Nacional.  

La APDH no es un actor neutral en la política argentina, claramente está enrolada en la izquierda dictatorial, esa que se sirve de los perfiles descriptos por el "Manual del Perfecto Idiota Latinoamericano". Por ende, adhiere al proyecto totalitario de corrupción estructural sostenido durante los infames 12 años del régimen kirchnerista, como lo demuestra su rechazo a los procesos judiciales que se llevan adelante contra Cristina Fernández. Es decir, la APDH es otra de esas organizaciones comunistas que, tratando de socavar al sistema democrático por la explotación de sus paradojas, siempre estarán alineadas con los enemigos de la República Argentina.

Tan obscena es la filiación comunista de la APDH, que exalta la figura del dictador Fidel Castro como el ejemplo a seguir. Y eso les resta toda autoridad moral para hablar en nombre de los derechos humanos. Claramente la APDH es una organización cerda, en los términos con que George Orwell escribió "Rebelión en la Granja", pues en la suerte de los cubanos queda en evidencia que a su criterio algunos humanos son más humanos que otros... 

La APDH, consustanciada con la tiranía castrista que intentó
exportar su "revolución" a través del terrorismo. 

EL CONFLICTO RAM

La denuncia de la APDH debe ser encuadrada dentro de la dinámica del Conflicto RAM, una guerra de Inteligencia programada para prolongarse en el tiempo y en la que los actores principales no aparecen sobre el terreno. El objetivo de la denuncia es simple y evidente: debilitar la capacidad de respuesta del Estado Argentino frente a nuevas arremetidas de acción directa.  

Y aquí debe verse el intento de aprovechar al máximo la reciente detención del cabo Francisco Pintos,  integrante de la Agrupación Albatros de la Prefectura Naval Argentina, por la muerte de Rafael Nahuel en un incidente ocurrido, el 25 de Noviembre de 2017, a consecuencia de la usurpación de terrenos en Lago Mascardi por parte de activistas mapuches.

En el actual contexto de incertidumbre electoral, con la posibilidad de un cambio de gobierno que signifique volver a replegar y privar de proactividad a las fuerzas federales, es bastante claro que sus efectivos tengan dudas considerables sobre la proyección del respaldo que esta gestión, desde el mero voluntarismo de la ministro Bullrich, intentó brindarles. 

El gobierno del Presidente Mauricio Macri no está en condiciones de entender la dinámica de ninguna guerra de Inteligencia por una sencilla razón: desprecia la Inteligencia de Estado y no cuenta con ella para la toma de decisiones. Es tan ostensible esa falencia que cabe preguntarse qué rol están jugando desde la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) Gustavo Arribas y Silvia Majdalani, al fin de cuentas cómplices del capricho de Patricia Bullrich en mantener acéfala a la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal (DNIC). 

A punto de terminar su mandato, puede asegurarse que Mauricio Macri no ha logrado recomponer al Sistema de Inteligencia Nacional colapsado durante el régimen. Y lo triste es que no era una tarea imposible. 

Quien no cuenta con fundamentos de Inteligencia en su toma de decisiones corre el riesgo de caer en el desgaste de la constante prueba y error, eso significa desperdiciar los siempre escasos recursos sin anticipar ningún escenario. Es decir: un gobierno siempre sorprendido por toda clase de sucesos. 

Lo que ocurre en el sur del país está dirigido desde Cuba y financiado con el sufrimiento del pueblo venezolano, como se desprende del viaje de Héctor Llaitul, líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM), a Caracas donde obtuvo apoyo del régimen de Nicolás Maduro. Y no por casualidad, sino porque detrás del aparente reclamo araucano hay un declarado cambio de sujeto revolucionario pergeñado por la intelectualidad comunista en reemplazo de un proletariado que ya no cree en el paraíso socialista. 

La lucha contra el capitalismo requiere potenciar los conflictos internos de los países democráticos, socavar sus instituciones y explotar sus contradicciones. En tal sentido las reclamaciones mapuches son totalmente funcionales al entrismo marxista y al relato de una Argentina genocida que deba sentirse culpable de su propia existencia. La APDH es parte de esa estrategia contra la República Argentina.  

MI SOLIDARIDAD

Ante la acusación de la APDH corresponde solidarizarse con los denunciados, sin que ello implique alterar en nada las críticas y elogios que la actual gestión del Ministerio de Seguridad ha merecido de mi parte. 

Sería un acto de cobardía intelectual omitir manifestar mi repudio a la opereta de la APDH contra Patricia Bullrich, Pablo Noceti, Gonzalo Cané (ya ex funcionario del Ministerio) y Gerardo Milman. 

Nadie que ame a la República y aspire a la irrestricta supremacía de la Constitución Nacional debe permitirse el silencio ante las maniobras comunistas. No es un ataque a cuatro funcionarios, ni a un gobierno; es el ataque artero y sostenido contra el estilo de vida soñado por los constituyentes de 1853.  


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
Estado Libre Asociado de Vicente López




viernes, 14 de junio de 2019

FEDERICO PINEDO, EL CHAPITA ESPACIAL



En círculos estelares preocupa la salud mental del terrícola Federico Pinedo, quien siendo miembro del prestigioso Senado de la Nación Argentina, ha presentado un proyecto de ley que eleva la mirada por sobre la coyuntura, hasta el infinito y más allá. 



Acaso agobiado porque su estrella senatorial se apaga bajo el rayo peronizador de Miguel Ángel Pichetto, no ha querido Federico dejar su banca sin mostrarse como un hombre de futuro y, al mismo tiempo, rendir homenaje a su visión cinematográfica del espacio exterior, desde Star Wars hasta Buzz Lightyear pasando por Alien. 

Siempre atento a encontrar soluciones prácticas, acorde al criterio de seriedad y realismo que caracteriza a la dirigencia política del país sudamericano, Federico Pinedo intuye que la respuesta a tantos problemas terrenales puede estar arriba, bien arriba. 

Por eso propone, a través del Proyecto de Ley S-1644/19, difundido en Twitter por el Dr. Pablo Torres Barthe (@AlberdianoArg) "regular la explotación y explotación de yacimientos minerales ubicados en el espacio ultraterrestre". 


Según explica el lúcido senador cambiemita, su proyecto parte de "la inteligencia que iniciativas como las que propongo serán generadores de nuevas inversiones y oportunidades de trabajo en la Argentina". 

Al instante de conocerse la iniciativa Federico "Buzz" Pinedo, la Cancillería Argentina ha recibido una carta de El Principito protestando lo que entiende es una pretensión inadmisible de un país terráqueo sobre el asteroide B-612. 

Resultado de imagen para asteroide principito b-612

Mientras estudia Cancillería la posibilidad de una disculpa con el dignatario del B-612, la opinión pública venusiana y lunática se pregunta si Pìnedo es así de orate o está ingiriendo algún tipo de sustancia estupefaciente. Porque hay una diferencia notable entre ser un visionario y ser un chanta alucinado. 

Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
Estado Libre Asociado de Vicente López







lunes, 10 de junio de 2019

ESAS CONFUSIONES DEL SEÑOR MILMAN


MEDIOCRIDAD ESTRUCTURAL Y FUNCIONARIOS SIN IDONEIDAD


Patricia Bullrich secudndada por Gerardo Milman en Paraguay.
Más allá del innecesario show para las cámaras, es positivo que se lleve la mirada al otro
lado de la frontera; pero el problema sigue siendo el desprecio por la Inteligencia Criminal.

Son muchas las razones que dificultan establecer en la República Argentina una política seria y sustentable en materia de seguridad. A partir de la inestabilidad política que caracteriza al país, la conducción pendular del Estado genera impedimentos culturales y especulativos en la propia burocracia, que no proyecta la continuidad de cualquier gestión más allá del cortísimo plazo. 

Es algo que podemos definir como “mediocridad estructural” y en ella pesa el poco apego a las normas del conjunto de la dirigencia política, que no da muestras de orientar sus acciones en pos de la irrestricta supremacía de la Constitución Nacional. 

Es una verdad de Perogrullo que de esa falta de convicción sobre el deber ser del país, se desprenden dificultades de tipo conceptual para interpretar y asumir que la seguridad consiste en garantizar el estilo de vida propiciado por la Constitución Nacional. 

Así, durante ya casi cuatro años, Patricia Bullrich ha gestionado en forma personalista el Ministerio de Seguridad, sin poder salir -ni intentar hacerlo- de la mediocridad estructural. Ciertamente puede ser evaluada positivamente si se toma como parámetro la deplorable gestión que la antecedió, pero esa es una vara muy baja, al ras del suelo desde que el kirchnerismo atentaba contra la Constitución y, por definición, no podía garantizar la seguridad. Ni podrá hacerlo en el caso de volver al poder.

Ahora, la calificación decae contrastando con el óptimo profesional y mucho más frente al óptimo ideal, porque las falencias técnicas en la gestión de Patricia Bullrich son muchas y notorias, tantas que en su conjunto determinan una gestión de seguridad meramente voluntarista, efectista, reactiva y de contención.

La principal de esas falencias es la ausencia de Inteligencia Criminal. Desde su llegada al Ministerio, Bullrich mantiene acéfala la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal (DNIC), que es dejar sin conducción idónea al Subsistema de Inteligencia Criminal y por lo tanto inoperante. 

Inteligencia es, muy simplemente, el proceso racional que antecede la toma de decisiones, consistente en reunir y analizar información a ese fin y previendo escenarios futuros. Que no haya Director Nacional de Inteligencia Criminal, implica que la ministro de Seguridad toma decisiones sin los debidos fundamentos de Inteligencia. 

Para peor, el área de Inteligencia Criminal fue puesta bajo responsabilidad de su Jefe de Gabinete, Gerardo Milman, alguien con tan poca idoneidad que posteando en Twitter demuestra desconocer la diferencia elemental entre Investigación Criminal e Inteligencia Criminal.

El afán de Milman por mostrar lo que no hay. 

Al sólo efecto didáctico, alguien debería explicarle al Jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad de la Nación los rudimentos básicos de Investigación e Inteligencia, así sabría que cuando la fuerza policial obra luego de una denuncia se hacen tareas de investigación, no de Inteligencia.

Las tareas de Investigación Criminal se llevan a cabo para esclarecer hechos ya ocurridos conforme el Código de Procedimientos Penal, de modo de aportar elementos de convicción al Poder Judicial. Inteligencia sigue otras reglas y otros propósitos, incluso otro tiempo verbal. 

Es grave que el Jefe de Gabinete del Ministerio de Seguridad de la Nación, Gerardo Milman, confunda Investigación con Inteligencia, pero no es algo nuevo, sino otra muestra más de una gestión ministerial que no valora el rol de la Inteligencia Criminal. 

Desprecio extendido a todo el gobierno nacional, porque del mismo modo el Presidente Macri no valora el rol de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), que es decir la Inteligencia de Estado; tal cual lo acreditan distintos sucesos de marchas y contramarchas, de prueba y error como su modo decisorio. Tanto así que ha reconocido, públicamente, no tener incorporada la práctica de la Inteligencia en su toma de decisiones.

La mediocridad estructural permite la existencia de funcionarios carentes de idoneidad a cargo de áreas sustanciales. Y en este punto es justo señalar que también acompañan a Bullrich elementos de probada idoneidad y eficiencia, lo cual hace todavía más difícil de comprender el rol asignado a Milman. 


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
Estado Libre Asociado de Vicente López

OMBLIGO PORTEÑO

El 7 de Junio de 2019, el Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, afirmó que "la Policía de la Ciudad es un orgullo para la Argentina".



Aprecio y respeto a los efectivos de la Policía de la Ciudad por haber trabajado con ellos en distintos operativos. Y entiendo que el Jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, elogie a su fuerza policial; pero para ser orgullo de la Argentina le falta mucho.

Policía de la Ciudad es una institución todavía en formación que debe forjar su idiosincrasia, algo que requiere décadas. Desde luego, está muy bien aspirar a ser un orgullo nacional, pero hay que tener conciencia, sensatez y humildad para no apresurarse a calificar antes de tiempo.

Aún no se ha consolidado la experiencia de "ser policía de la Ciudad" para definir una identidad institucional distintiva, con una vocación y un sentido del deber específicos. Necesariamente, al provenir muchos de sus elementos de otras fuerzas, esa amalgama debe madurar.

Luego está esa cuestión muy porteña de creer que trascender del orgullo local al orgullo nacional es un paso simple, casi automático por ser la capital de la Nación. No lo es. 


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.

jueves, 6 de junio de 2019

NO TODOS LOS POLÍTICOS MIENTEN


Y si mañana es como ayer otra vez 
lo que fue hermoso será horrible después. 
No es sólo una cuestión de elecciones. 

Charly García (Cerca de la Revolución)


Saliendo de su internación hospitalaria, dijo Alberto Fernández que no debatirá con Mauricio Macri porque "no tiene sentido debatir con un mentiroso". 

Y, al margen de lo establecido por Ley 27.337 para los debates presidenciales, no se me ocurre una peor excusa en quien fue designado candidato presidencial por Cristina Fernández para que mienta por ella: fabuladora compulsiva, viuda de Kirchner y aspirante a sucesora de Fernández...  

En unas pocas palabras Alberto Fernandez expuso tanto su desprecio por las reglas de juego como su cobardía intelectual. 

Argentina, país con daño institucional y degradado en su cultura hasta la merma intelectual, no se escandalizará porque un candidato anteponga sus caprichos a la Ley, del mismo modo que no se ofende por las mentiras ni la cobardía. Es lo que viene de la casta política; por eso el daño, la degradación y la merma. 

Que la campaña presidencial es un concurso de mentirosos lo demuestra la historia de los postulantes, claro que, por fuera de la casta política, es posible encontrar excepciones. Porque también se postula a la Presidencia de la Nación Juan José Gómez Centurión, alguien que combatiendo en la Guerra de Malvinas le dijo a un herido tras las líneas enemigas: “aguanta aquí que, sea como sea, yo te prometo que vuelvo a buscarte”. Y cumplió. 

Entonces no todos los políticos se forman en la mentira. Siempre hay en la política personas de bien que honran con hechos a sus palabras. El honor es esa relación certera entre las palabras y los hechos, la misma que hace serios a los países que respetan sus constituciones. Por lo tanto, al menos esta vez, no es cierto que estemos obligados a votar mentirosos. Y no es sólo una cuestión de elecciones. 




Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha.
Estado Libre Asociado de Vicente López.






lunes, 3 de junio de 2019

ENCUENTRO CON LA JUVENTUD DEMÓCRATA




Agradezco a Juan Carlos De Marco y Ezequiel Oscar Gigante la invitación a disertar para los jóvenes del Partido Demócrata de la Provincia de Buenos Aires.

El encuentro tuvo lugar el domingo 2 de Junio a las 20:00 hs. Muy alentador ver que, comenzando por sacrificar las últimas horas del descanso previo al reinicio de la semana, hay quienes sostendrán en el tiempo la vigencia del Himno y la Constitución Nacional. Especialmente en estas circunstancias, cuando otra vez se cierne sobre la República la amenaza del totalitarismo, que ya anuncia su intención de derogar la Constitución.

En cada momento que comparto con jóvenes decididos a la lucha política en defensa del estilo de vida propiciado por la Constitución Nacional, cobro conciencia de las dificultades que tendrán que vencer y no puedo más que admirarlos. 

Ninguna generación de argentinos la tuvo tan difícil como los jóvenes de hoy. Ninguna. 



Me pesa mucho frente a ellos el pertenecer a una "generación de arena", que lejos de ser una roca que a prueba de tempestades y oleaje se erigiera como un faro, para señalar el futuro hacia esa gloria que reclama el Himno y en cuya significación coincidían Sarmiento y Alberdi, se haya desgranado en la insignificancia; como la arena que aplana el mar. 

Es una deuda generacional enorme, de la cual tengo conciencia, porque frente a la sombra de totalitarismo que vuelve a oscurecer el destino del país, la casta política, enfrascada en sus privilegios e intereses mezquinos, el único futuro que puede ofrecer es Ezeiza para los jóvenes y Chacarita para los viejos. 

Por eso admiro a los jóvenes que, abrazados al Himno y la Constitución Nacional, comienzan a batallar. 

Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha, 
un liberal que no habla de economía.

sábado, 1 de junio de 2019

LA MIOPÍA POLÍTICA DE MAURICIO MACRI

La realidad argentina es demasiado compleja, además de muy poco complaciente con las buenas intenciones, como para ser abordada desde el gobierno con criterios simplistas. Pretender reducir la solución a problemas de toda índole, acumulados por décadas, implementando solamente una mejor gestión es miopía política. Esa alienación o escape hacia el confort de la virtualidad,  puede acarrear consecuencias desastrosas; porque la trascendencia que el gobierno supone en cada ladrillo bien colocado, resulta exagerada frente a la inercia de confusión moral que no ha sabido, ni querido, remover de la sociedad.



Un posteo en su muro de Facebook es la mejor demostración de Mauricio Macri como un ingeniero que, lejos de ser un estadista o un político hábil, sostiene una visión limitada de la política y rebaja la función presidencial a la gestión de obras. 

Publicado en Facebook por Mauricio Macri el 01JUN19.

Desde ya que son necesarias las obras, pero con eso no alcanza. Por definición no alcanza, y mucho menos en el contexto de país subvertido como el que dejó el régimen kirchnerista: dañado en sus instituciones y degradado en su cultura hasta la merma intelectual. 

CAMBIEMOS capitalizó la sana reacción republicana frente al proyecto totalitario de corrupción estructural de la "Cristina eterna", pero una vez en el gobierno no supo interpretar que se le reclamaba como prioridad alcanzar y defender el estilo de vida propiciado por la Constitución Nacional. 

Esa era el sentido del cambio, y su requisito ineludible para ser alcanzado era la confrontación cultural que, por la cobardía del "no se puede porque vuelven", se prefirió eludir. Así se redujo el cambio a mejorar la gestión, y las consecuencias políticas de esa tibieza imperdonable están en las encuestas electorales: los que echamos en 2015 tienen chances de volver.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha.
Estado Libre Asociado de Vicente López


¿Qué es la Derecha?

¿Qué es la Derecha?
La Derecha, soy yo.

Ariel Corbat

Ariel Corbat
Ariel Corbat