martes, 28 de febrero de 2023

IMPROVISACIÓN Y MEDIOCRIDAD POLÍTICA, DALE QUE VA ASÍ COMO VA...




Hace años, largos años, brego porque cada partido político de la oposición presente a la sociedad su "Gabinete en las sombras", que al modo del parlamentarismo inglés, garantiza racionalidad en las críticas y alternativa activa en la eventualidad de una crisis política.

Lamentablemente, ningún partido político argentino cuenta con su "Gabinete en las sombras", lo cual demuestra insuficiencias organizativas que en la falta de previsibilidad sólo  garantizan previsibilidad de improvisación ante la eventualidad del poder.

Las razones por las que no hay ningún "Gabinete en las sombras" son muchas y variadas. El deplorable panorama que ofrece la política argentina, con predominio de personalismos y obsecuencias, las dejan a vista de cualquiera lo que haría largo y tedioso listarlas.

Pero hay una razón que merece destacarse: la ignorancia sobre un aspecto de la reforma constitucional de 1994 y la cobardía de la mal entendida corrección política que por cualquier cosa y por las dudas se asusta de ser llamada "destituyente".

Me han dicho eso destacados referentes políticos de distintos espacios, sin mejor argumento que el temor a la reacción de la facción en el gobierno. O sea: raras oposiciones que temen confrontar y, además, desconocen la Constitución Nacional que dicen defender.

La reforma constitucional de 1994, que no por mala debe ser ignorada, introdujo a nuestro sistema republicano  un ensayo de aproximación al parlamentarismo en la figura del Jefe de Gabinete "con responsabilidad política ante el Congreso de la Nación" (Art. 100).

No obstante ello y que, voto de censura mediante, el Jefe de Gabinete puede ser removido por la mayoría parlamentaria, dando posibilidad a que esa mayoría en ambas cámaras imponga la designación de un nombre al Presidente; ese rasgo parlamentario no ha sido explorado.

Más allá de alguna mención de candidatos presidenciales, como Javier Milei quien dijo estar armando su "Gabinete en las  Sombras", lo cierto es que no se ha institucionalizado la práctica organizativa de estar siempre lista la oposición para ser una alternativa de poder.

Por último, "Gabinete en las sombras" no significa secreto ni misterioso, es sólo la designación de un equipo con propuestas de alternativa al gobierno que la ciudadanía debe conocer, vale decir un activo de transparencia, preparación y previsibilidad política.

Y por eso mismo no los hay.

Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha,
un liberal que no habla de economía.