Del acto oficial por el Día de la Independencia y el banderazo del 9 de Julio de 2021 en San Nicolás ¿qué queda?
Qué hoy seguimos tras la huella de Venezuela.
Sin nada que celebrar, la Patria está agonizando, bajo un gobierno títere, golpista, corrupto, criminal y comunista.
Tanto se han perdido los valores de nuestro ser nacional que aquello que afirma el Himno Nacional debe ser planteado como pregunta:
¿Ved en trono a la noble igualdad?
Hay una convivencia forzada e incompatible en Argentina, entre un sistema parasitario de privilegios y prebendas sostenido por la casta política, y una ciudadanía dispersa y desorganizada que añora la elemental decencia del estilo de vida propuesto por la Constitución Nacional.
En ese contexto, la catarsis de la ciudadanía no cambia el curso de la historia, ni hablar de Patria vuelve patriotas a los traidores en el gobierno.
Así, la pose gaucha de Patricia Bullrich es puro humo ante el daño consumado de despejarle el paso a María Eugenia Vidal.
Cualquier lista de candidatos encabezada por Vidal es, dicho en términos académicos, una mierda. Sólo votable por kirchneristas con pudor.
Imaginese lo que pueden llegar a votar en el Congreso quienes aceptan hacerle de comparsa a la que siendo gobernadora de la Provincia de Buenos Aires mandó votar, a la bancada cambiemita en la legislatura, el proyecto del Frente Para la Victoria de hacer ley la mentira de los 30.000 desparecidos. Más kirchnerista que eso únicamente en el círculo íntimo de Cristina Fernández...
La centralidad de Vidal demuestra que en Juntos por el Cargo no hay halcones ni palomas: hay gallinas. Se agotó el coraje de Patricia Bullrich cuando argumentando creer que ganaba la elección pero luego los K iban a atacar a Rodríguez Larreta cedió el paso a Vidal.
Huyó así de dos peleas, la interna contra Vidal y la que sobrevendría (según su propia apreciación) por la gobernabilidad de la Ciudad de Buenos Aires luego de la elección. Sobre esa cobardía, que sus obsecuentes se niegan a ver, se postula a la Presidencia en 2023.
Ya fue. El humo no dura tanto y dos años aquí son un desafío a la lógica del tiempo.
Esta foto, y la película de la que forma parte, demuestra que Juntos por el Cargo no es oposición al kirchnerismo sino colaboracionismo explicito.
Desde el golpe de Estado K que el 19 de Marzo de 2020, con excusa de pandemia, perpetró el gobierno de Alberto de la Fernández contra la Constitución Nacional, en ningún momento los cambiemitas amagaron siquiera dar la pelea de fondo. No han denunciado el golpe, ni han llamado a derrocar al gobierno golpista, o sea: no sirven para nada.
Son tan inútiles, y están tan cómodos en la inutilidad, que ni siquieran se han plantado para convertir en un boomerang contra el gobierno la última ocurrencia de los cubanos.
Más allá que la opereta cubana sobre el apoyo de la Presidencia de Mauricio Macri al "golpe de Estado" (que no fue tal) en Bolivia, sólo puede resultar creíble para los subnormales que siguen repitiendo que a Santiago Maldonado lo mató la Gendarmeria, la cuestión merece algunas consideraciones.
Por lo pronto, y justo el Día de la Independencia, volvió a ratificar Alberto de la Fernández que encarna un gobierno títere de la dictadura castrista.
Los cubanos armaron el guión de la opereta de victimización de sus satrapías, y él, obediente, lo propaló sin ningún filtro. Pues convengamos que llamar "material bélico" a elementos antidisturbios es una grosería tan inaceptable como la sarasa absurda que hizo Sergio Berni queriendo explicar el calibre 45.
La opereta cubana busca consolidar sus satrapías en Bolivia y Argentina. A Luis Arce le sirve otro enemigo exterior (lo que siempre fortalece al gobierno), y a Fernández otro motivo de conflictividad interna para mantener la polarización ficticia que explota el kirchnerismo: divide y reina.
Y no importa lo burdo de la opereta, ni la grosería de falsificar una nota llamando "material bélico" a elementos antidisturbios.
Cuánto más ridículo el globo de ensayo mejor se analiza, si da algún resultado, la credulidad por miseria intelectual de los países colonizados. Y sobre esa credulidad se opera.
El resultado aquí fue que bastó un papel trucho para que el gobierno K, desconociendo la continuidad histórica del Estado, pusiera de inmediato ministerios e instituciones al servicio de validar una mentira de factura desprolija.
Imagínese si intentaran algo prolijo...
En las acciones de guerra psicológica calcular la posible traza, velocidad de circulación y duración de rumores, mentiras y falsas informaciones es vital.
A los soviéticos los obsesionaba conocer ese detalle de las sociedades capitalistas. Los cubanos son discípulos sobrevivientes y consecuentes de la Inteligencia soviética (Leer: "Operaciones de acción psicológica").
Alguien dirá que es fantasioso o conspiranoico que Cuba, con su población pasando necesidades, destine sus recursos a intervenir en otros países de la región.
El error en ello es creer que a los comunistas les importa el sufrimiento de la gente. Alemania Oriental levantó su infame muro para que ningún beneficiado por el paraíso socialista huyera al confort capitalista, Corea del Norte siguió adelante con su carrera armamentista mientras su población padecía hambrunas bíblicas, y Cuba sobre la miseria de los cubanos y venezolanos sigue exportando su "revolución".
Argentina es un blanco de la agresión marxista, ya no por la vía del terror, como en los setentas, sino por el juego de dominación y quiebre cultural, en el que todo lo que haga de Argentina un país cada día más irracional, sirve para afirmar el rumbo del gobierno títere, golpista, corrupto, criminal y comunista, en la huella de Venezuela (Leer "El horror está aquí").
Porque la irracionalidad que exacerba el fanatismo va más allá de los castristas locales. Abarca otros espacios políticos.
Esa irracionalidad obra también como parálisis de corrección política, y para el caso se revela en que esos mismos elementos antidisturbios supuestamente enviados a Bolivia, debieron usarse todos frente al Congreso en lugar de dejar que durante horas apedrearan a la Policía.
De hecho, lo único que me molesta del supuesto envío de elementos antidisturbios a Bolivia es que no se hayan usado aquí para aplastar la violencia comunista.
La irrestricta supremacía de la Constitución Nacional no se alcanza ni sostiene siendo compasivos con sus enemigos.
Entonces quiero recordar que el sacrificio que hizo la Policía de la Ciudad de Buenos Aires en la Plaza de los Dos Congresos el 18 de Diciembre de 2017 excedió el sentido común. Esos policías demostraron ser dignos de una mejor conducción política y de otra sociedad, que sepa valorarlos. Quedaron, literalmente, parados sobre pilas de cascotes que los comunistas arrojaron contra la República.
Quiero recordar cada piedra de la izquierda contra la República.
Quiero recordar cada herida en los Policías de la Ciudad de Buenos Aires.
Quiero recordar que la batalla cultural también exige poner el cuerpo.
Porque no será hablando que saldremos de esta.
Desde 1853 la viabilidad de la Nación Argentina como país independiente nunca se ha visto tan comprometida como en el presente.
Tenemos gobierno títere, oposición absurda y jóvenes que -con toda lógica- entienden su futuro emigrando.
Vicente López sabía, y su pregunta tiene hoy una triste actualidad:
"¿No los veis sobre el triste Caracas
luto, y llantos, y muerte esparcir?"
Argentina transita la misma huella de Venezuela, y no vamos a salirnos intentando lo mismo que intentaron los venezolanos.
Oscar Pérez, el incomprendido patriota y mártir venezolano, tenía razón al levantarse en armas: con agitar banderas no alcanza.
La Patria volverá a ser a costo de sangre, o ya no será.
Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha.
www.plumaderecha.blogspot.com
Vi el corto de Berni, el cual parece que también es corto. El calibre es .45, nada que ver con la fuerza viva en la boca. REspecto a los calibres, son lo mismo, uno se expresa en milímetros (11,25) y el otro en pulgadas (que se expresa .45, lleva un punto delante).
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