jueves, 24 de agosto de 2017

LA LEY DE LA PATRIA




Crudamente: Santiago Maldonado es una anécdota. Lo que está ocurriendo en el sur no empezó con su ausencia, ni terminará al darse con su paradero. Planificado o casual su caso se ha convertido en un catalizador de la violencia y la propaganda política, dando una inesperada notoriedad a la práctica terrorista y el delirio discursivo de un personaje grotesco como Facundo Jones Huala.

Resulta bien ridículo un mestizo racista, pero a lo largo de la historia otros personajes grotescos han causado tragedias a causa de ser subestimados o mal ponderados sus contextos; conviene tenerlo presente para evitarnos lamentaciones tardías.

La izquierda, de la que forman parte los organismos de derechos humanos, alienta cualquier intento insurreccional; porque tanto el concepto de la Nación Argentina como la filosofía de la Constitución Nacional son incompatibles con sus prédicas clasistas y proyectos dictatoriales. Los mapuches son las principales víctimas de su último experimento de agitación, desde que pretenden negarles su condición de argentinos y enfrentarlos con otros argentinos. Eso es grave e inadmisible.

Defender el estilo de vida señalado por la Constitución Nacional, como la integridad territorial, no debe generar ninguna vacilación en las autoridades encargadas de velar por su irrestricta supremacía. Es hora de librarnos de la pretendida "culpa argentina" por genocidios que no existieron y recuperar el sentido común, porque tenemos leyes que aplican a casos como este. Ciertamente no se puede ni se desea obligar a nadie a ser argentino, pero si se puede, se debe y es deseable obligar a todos los que habitan suelo argentino a respetar la ley. Dentro de la ley todo, fuera de de la ley nada.


La primera respuesta está escrita en la propia Constitución Nacional, que en su artículo 22 establece: "El pueblo no delibera ni gobierna, sino por medio de sus representantes y autoridades creadas por esta Constitución. Toda fuerza armada o reunión de personas que se atribuya los derechos del pueblo y peticiones a nombre de este comete delito de sedición". Consecuentemente, contempla el artículo siguiente la posibilidad de aplicar el estado de sitio para el caso de conmoción interna, pero antes de tal extremo corresponde aplicar la Ley 24.059 de Seguridad Interior, cuya finalidad es tan simplemente garantizar el estilo de vida propiciado por la Constitución Nacional.

La ley de Seguridad Interior contempla la creación de un Comité de Crisis para cuando "estén en peligro colectivo la vida, la libertad y el patrimonio de los habitantes de una región determinada" o "se encuentran gravemente amenazados en todo el país o en una región determinada del mismo, los derechos y garantías constitucionales o la plena vigencia de las instituciones del sistema representativo, republicano y federal".

Ahí está el instrumento previsto por el legislador para enfrentar esta situación: convocar a través del Consejo de Seguridad Interior un Comité de Crisis y designar algún funcionario nacional, de carácter político y civil que, como Delegado, coordine el diseño de un plan estratégico y asuma toda la responsabilidad de las operaciones. Porque si algo enseña la historia, es que no se puede tirar el fardo sobre las fuerzas de seguridad y policiales, para juzgarlos después con caras de desentendidos; hay que conducirlas. La política tiene que hacerse cargo, porque para eso está.

La respuesta, como siempre, es la ley. Y requiere del gobierno nacional, como de los gobiernos de las provincias afectadas, la voluntad política de sobreponerse a la presión de la izquierda; para que el problema deje de serlo antes de escalar en busca de los extremos.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha.
www.plumaderecha.blogspot.com
Estado Libre Asociado de Vicente López


sábado, 19 de agosto de 2017

CORAJE Y MÉRITO EN PATRICIA BULLRICH


EL PROBLEMA NO SON "LOS MAPUCHES", ES LA IZQUIERDA.




El caso de Santiago Maldonado amerita consideraciones de distinta índole. Desde luego hay que determinar su paradero, sin cerrarse a ninguna hipótesis y dejando que en la investigación sea la evidencia la que valide o refute cada una, para profundizar o descartar hasta llegar a la verdad.

Ciertamente, tengo mis dudas respecto a la idoneidad del magistrado interviniente, el juez federal Guido Otranto, quien parece obrar a velocidad de quelonio; rasgo propio del fuero y por el que se apoda "tortuga" a otro juez.  

Cualquiera sea la suerte corrida por Maldonado hay que tener en claro la cuestión de fondo y no confundir los tantos. El problema no son "los mapuches", es la izquierda. Facundo Jones Huala, un pretendido cacique, al que los verdaderos lonkos mapuches además de saberlo mestizo de sangre galesa consideran un demente propiciador de desgracias, no puede llevarnos a una generalización absurda. Los mapuches, igual que el resto de los argentinos de distintas ascendencias, tienen garantizado un lugar de convivencia dentro de la Nación Argentina; al amparo de la Constitución Nacional. 

Pretende la izquierda usar el disfraz de "los mapuches" para que la República Argentina no sea República ni sea Argentina. Odia, con todas sus fuerzas, la continuidad del Estado Nacional que se organizó sobre la Constitución de 1853 por el empuje modernista de la Generación del 80. Lamentan que la potencia inercial de la Patria, aún hoy, con todos los desaciertos y desvaríos que transitamos a lo largo del siglo Cambalache y el desastroso comienzo del XXI, siga sosteniendo el trazo grueso de la desdibujada identidad nacional. Porque, con razón. le atribuyen al genio de esa generación notable, con el Presidente Julio Argentino Roca a la cabeza, haberlos vencido en el tiempo. 


Se necesita una gran ingenuidad, lindante con la imbecilidad, para no advertir que es la izquierda y no "los mapuches" quien ha llevado a cabo el ataque contra la Casa de Chubut en Buenos Aires, la que en el Escuadrón de Gendarmería Nacional de El Bolsón arrió y quemó la Bandera Argentina, vandalizando la memoria de los caídos en Malvinas, y la que en Córdoba atentó contra el hotel del Círculo de Suboficiales de Gendarmería. Es la izquierda la que so pretexto de la "solidaridad" pretende "organizar la bronca" ejercitándose en el terrorismo. Son los mismos que el 24 de Marzo de 2017, en la Plaza de Mayo, reivindicaron la lucha armada y a las organizaciones terroristas de los años de plomo.

En este contexto merece elogio la firme postura de Patricia Bullrich como ministro de Seguridad de la Nación. Su voluntad de pelea es realmente destacable y el rasgo que más le aprecio; tanto que esa misma virtud desnuda falencias del Ministerio y que acaso, en buena parte también lo sean del gobierno. Un gobierno al que Patricia Bullrich ha sabido defender al ser interpelada en el Senado de la Nación, desarticulando el ataque de los senadores kirchneristas, racionalmente y desde la institucionalidad republicana. 

El doble mérito de Bullrich en el Congreso fue tanto ratificar el carácter republicano de la Presidencia de Mauricio Macri, sin permitir paralelo alguno con gobiernos de facto, como afirmar la pertenencia de las fuerzas de seguridad al orden democrático. 

Son contados los políticos con el coraje para jugarse y bancar a las fuerzas de seguridad, por caso la Gendarmería Nacional, frente a la inercia del relato kirchnerista; que no es otra cosa que la "corrección política" escrita por la izquierda desde la supuesta defensa de los derechos humanos. 

Muchas veces se pregunta qué cambió con CAMBIEMOS, pues bien, téngase presente que Patricia Bullrich dijo en el Senado: "No voy a cometer la injusticia de tirar un gendarme por la ventana para sacarme responsabilidades"; un cambio rotundo comparado con el lamentable tiempo en el que la seguridad de los argentinos estuvo en manos de Nilda Garré. 

Patricia Bullrich tiene ese mérito y ese coraje que el cambio necesita, consecuentemente vayan estas líneas como parte de mi apoyo.


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
Estado Libre Asociado de Vicente López


sábado, 12 de agosto de 2017

QUERIDO DONY (el sutil encanto de creerse importante)


Mi amigo Dony, jugando al golf.


Vicente López, Agosto de 2017

Querido Dony


Perdoná que no atendí tus reiterados llamados, estaba jugando a la Playstation y vos sabés que no me gusta hablar mientras juego. Te escribo porque si te llamo vamos a estar horas hablando y no quiero que nos vayamos por las ramas como siempre hacemos.

Coincido contigo en que Venezuela es un desastre y aplaudo que no descartes una intervención militar. Es altamente tranquilizador saber que en tus merecidas vacaciones, mientras jugás al golf en Nueva Jersey, seguís pensando en hacer del mundo un lugar menos peligroso y más agradable. Eso es algo que Barack no hacía; pues afectado por recibir el Premio Nobel de la paz perdió la perspectiva del escenario internacional. 

Es tiempo de volver al camino señalado por  Theodore Roosevelt y usar el gran garrote como lo hizo Harry Truman; no una sino ¡dos veces!. Espero que en esa senda tengas la cuota de audacia que le faltó a Ronald Reagan y saldes, al fin, la deuda deshonrosa que John Fitzgerald Kennedy contrajo con los libres del mundo cuando traicionó a los patriotas cubanos en Bahía Cochinos, abandonándolos a merced de la dictadura. Desde entonces la tiranía comunista de Cuba ha sido un foco infeccioso, derramando permanentemente su ponzoña totalitaria para impedir una América enteramente democrática. 

Debes entender, Dony, que Nicolás Maduro no es un dictador que haya emergido de la propia Venezuela, sino un títere de la dictadura castrista desde que Hugo Chávez entregó ese país a Fidel Castro. Por ende tomar acciones militares sobre Venezuela sería combatir un síntoma del mal, pero no la cura de la enfermedad. Te lo escribo en negrita para fijar el concepto.

Mi consejo, entonces, es que vayas por Cuba; que reconsideres tus opciones para, marines mediante, jugar al golf en La Habana, y acaso (hermosa palabra la palabra "acaso") tener revancha de aquel partido que te ganó Mauricio. Pensá que en el mundo entero el sabor del "Cuba Libre" será auténtico y para ello es preciso derrocar a Raúl Castro haciendo que siga el destino que le cabe a los tiranos, es decir: Southampton o la horca. La liberación de Cuba, ahorrará sangre porque dejará a Maduro, irremediablemente, en situación de podrido; listo para una caída a lo Ceaucescu. 

Luego de intervenir militarmente en Cuba para liberarla y si en Venezuela el cadáver de Maduro cuelga como en su momento el de Mussolini, tomará nota el dictador de Norcorea que el legado de Truman vive en las decisiones de Donald Trump. Que entienda el maldito gnomo amarillo que tenés en claro lo que enseñó Talleyrand: "las bayonetas sirven para todo menos para sentarse sobre ellas"; cosa que también aplica a las armas nucleares. 

Amigo mío, hay promesas que todos saben sólo son eso, como el muro en la frontera con México, y nadie espera que la cumplas, pero en otras cosas es necesario mantenerse firme, y si decís que va bomba va bomba, porque la competencia con Putin y los chinos requiere que, ante cada duda sobre qué camino seguir, te repitas la misma respuesta que Cerebro le da a Pinky: "tratar de conquistar al mundo". Como decía Harry, "un bombazo atómico no se le debería negar a ningún enemigo". Fuego en el hoyo y hoyo en uno, my friend.

Esa es la tuya. Es tuya Dony, así que agarrala como a ella le gusta y por donde vos sabés...


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha.
Estado Libre Asociado de Vicente López

sábado, 5 de agosto de 2017

¡VAMOS ALACRANES!


Las competencias deportivas dejaron de atraerme. Me gustaban los mundiales de Fútbol hasta que esa magia se evaporó. Lo único que al presente me despierta interés de hincha es el equipo Alacrán de la Gendarmería Nacional en la Competencia Fuerzas Comando.  

Alacranes de Gendarmería Nacional durante una de las pruebas
de la Comptencia Fuerzas Comando 2017, celebrada en Paraguay. 

En el mes de Julio se llevó a cabo la XIII edición de la COMPETENCIA FUERZAS COMANDO que este año tuvo por sede a Paraguay. Se trata de un evento organizado por el Comando Sur de los Estados Unidos que reúne a fuerzas especiales de toda América en representación de 20 países.




Por la República Argentina participó el equipo del Escuadrón Alacrán de la Gendarmería Nacional, que finalizó la competencia en el 9º puesto, empatado en 2450 puntos con el equipo de El Salvador. Es decir que los Alacranes conservan el nivel de mitad de tabla para arriba logrado el año pasado en Perú, ocasión en la que obtuvieron el 7º puesto, igualado en 2540 puntos con el equipo chileno. El equipo de Colombia, que ganador de 8 ediciones se presentaba como favorito para ganar también en Paraguay, lideró la competencia pero en la última jornada fue superado por los hondureños. Es muy bueno que la competencia no tenga dueño, así que me alegra ver a Honduras pasar de segundo en Perú 2016 a primero en Paraguay 2017.

El equipo hondureño en la ceremonia de cierre.
Ganadores de la Competencia Fuerzas Comando 2017.

A lo largo de los años la Competencia Fuerzas Comando se ha tornado cada vez más exigente. Y en la búsqueda de la excelencia varios equipos se integran con componentes de distintas fuerzas especiales, convirtiéndose en auténticos seleccionados nacionales. Se tiene conciencia que tener un lugar destacado en las posiciones finales requiere bastante más que el máximo esfuerzo personal de los participantes con una preparación física y mental tal que, aún en condiciones de estrés, les permita hacer adecuado uso de sus capacidades. Aquí se enfrentan fuerzas de élite que ponen a prueba tanto su instrucción, como sus medios materiales y las técnicas que su mejor empleo requieren. Es siempre una gran oportunidad para ver, comparar y aprender.

Incluso si se tomase con un sentido estrictamente deportivo, la Competencia Fuerzas Comando es un evento apasionante que merece mayor cobertura y difusión. Sin una adecuada cobertura mediática, falencia de los organizadores, apenas unos pocos interesados hemos seguido (jornada a jornada) las alternativas de las distintas pruebas por medio de las redes sociales.

Claro que, más allá de lo que surge a primera vista, esta competencia también dice mucho sobre la institucionalidad de los distintos países. Y en ese sentido Argentina tiene un déficit que se constituye en obstáculo para que su equipo de Fuerzas Especiales pueda dar el salto de posicionarse y consolidarse dentro de los primeros cinco en las calificaciones. Eso es algo que excede el ámbito de la Gendarmería Nacional y también el objetivo de esta nota, pero es necesario decirlo para ponderar el esfuerzo con el que nuestros alacranes logran representar muy dignamente al país. 

En una pasada edición de esta misma competencia, los gendarmes dieron un emocionante ejemplo al cruzar la línea de llegada de una de las pruebas cargando, a hombros, al camarada que se había descompensado por la dura exigencia. A diferencia de otros equipos, eligieron resignar puntos antes que abandonar a uno de los suyos. Esa mística, forjada en Malvinas, es la que define el perfil del Escuadrón Alacrán.

Desde la ciudadanía hay que saber apreciar la importancia que tiene para la moral institucional de las fuerzas de seguridad la consideración de sus tropas de elite. Las fuerzas especiales, preparándose para dar respuesta en situaciones extremas, cumplen un rol motivacional sobre sus camaradas, son su selección, lo mejor de ellos. Y alcanzando extremos de profesionalización son tanto el ejemplo a emular como un faro para reclutar elementos con real vocación.

En el 2018 está previsto que la Competencia Fuerzas Comando se realice en Panamá. Y ya desde ahora:

¡VAMOS ALACRANES!


Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
www.plumaderecha.blogspot.com
Estado Libre Asociado de Vicente López