Convencidos que el pensamiento propio se enriquece con la presencia del otro, surgió del Grupo Consensos la idea de plantear un diálogo público, charla o debate, entre los filósofos Silvio Maresca, referente de Consensos, y Ricardo Forster, principal exponente de Carta Abierta.
Tomó entonces el compañero Juan Maya la responsabilidad de contactar a Ricardo Forster; a quien planteó que el encuentro girase en torno a la cultura y la política, con un temario a definir de común acuerdo entre los dos protagonistas, lo mismo que la modalidad del encuentro.
Por mi parte, inicié gestiones para que el evento se realizase en Vicente López, planteando que el lema "Ciudad para vivir" implica que necesariamente sea también una "Ciudad para pensar"; y quiero destacar que este vecino tuvo muy buena recepción en la Dirección de Cultura a cargo de Hernán Nogués.
La semana pasada, como parte de las tratativas, compartí un ameno encuentro con Juan Maya y Ricardo Forster en el café Carioca.
Forster, a quien no conocía personalmente, me resultó un tipo agradable y de buenos modos. Desde luego, sabía de antemano que sus ideas no son las mías, pero me sorprendió preguntando el porqué del diálogo y la razón por la que debería aceptar. Yo creo que el diálogo se explica solo, por la posibilidad de poner a prueba las ideas. Le hacía algún ruido, dijo, no tanto que esto viniera de Consensos -un grupo cercano al Peronismo Federal (y que yo integro sin ser peronista)-, sino que un municipio a cargo del PRO facilitara el lugar para su realización.
Hoy Ricardo Forster decidió rechazar la invitación. Por supuesto está en todo su derecho, sin embargo lo lamento. Me queda por sensación que algunos kirchneristas prefieren monologar, hablar solamente en la contención que les brinda 678, acaso porque no buscan confrontar ideas sino imponerlas, o acaso porque sus convicciones no son tan sólidas como entre ellos parecen decirse.
Y subrayo el "algunos", no sólo porque no me gustan las generalizaciones, sino porque me consta que dentro del espacio kirchnerista se encuentran, también, personas con el valor de defender sus ideas civilizadamente.
Como dije en su momento, al organizar la charla debate entre Rafael Bielsa y Ricardo López Murphy, hoy vuelvo a ratificar mi compromiso:
"Quiero que mis convicciones sigan siendo auténticas, que sean puestas a prueba por las razones del otro y por las dudas propias. Ayudémonos a pensar".
Ariel Corbat, La Pluma de la Derecha
Estado Libre Asociado de Vicente López